El Ayuntamiento de Almassora intensifica las gestiones con la Generalitat, titular del edificio 167 (Grupo B) de la avenida José Ortiz, para permutar la propiedad del bloque por otro. La concejala de Urbanismo, Carmina Martinavarro, se reunió el viernes con la directora general de Vivienda, Rebeca Torró, para buscar soluciones a la regeneración del entorno, como informó ayer en el pleno, donde reiteró que el edificio no se rehabilitará.

De hecho, el secretario municipal estuvo presente en el encuentro celebrado en Valencia con el objetivo de desbloquear el proceso. «A pesar de que el inmueble ya está vacío y, por tanto, las molestias vecinales no existen, ambas partes queremos una solución para esta zona, que ofrece posibilidades urbanísticas y un futuro mucho mejor tanto para Fátima como hacia Pío XII», incidió.

Según destacó en la sesión plenaria, la política de la Generalitat valenciana está enfocada a la recuperación de espacios públicos que ofrezcan un parque de hogares dignos, como apuntó la directora general durante la reunión mantenida la semana pasada y en la que confirmó que el Consell respetará la decisión del consistorio de derribar el polémico Grupo B «siempre que la solución ofrecida por el Ayuntamiento resulte compatible con la recuperación de casas para las personas que lo necesitan». Torró indicó que «están abiertos a analizar las alternativas existentes para estudiar ambos objetivos».

Consistorio y Conselleria se comprometieron a valorar otras construcciones que posibilitarían la permuta y que permitirían al Ayuntamiento regenerar el entorno de la avenida José Ortiz en el extremo oeste tras el derribo del inmueble, de titularidad autonómica. Martinavarro recordó que en esta zona se construirá el colegio Santa Quitèria, dado que su ubicación actual en barracones no será la definitiva, sino que el centro se edificará en el tramo opuesto del vial, junto a la calle Derechos Humanos. En este eje está la sede de Servicios Sociales y el entorno cuenta con varios solares por desarrollar.