El departamento de Contratación del Ayuntamiento de Almassora publicó ayer la licitación de las obras de peatonalización de la calle San Joaquín y la plaza de la Iglesia por valor de 487.793,07 euros (IVA incluido). El proyecto en el casco antiguo de la localidad está cofinanciado por el consistorio y la Unión Europea, a través de los planes Feder, al 50%.

Las empresas interesadas tienen un plazo de 20 días para presentar sus ofertas. La alcaldesa, Merche Galí, y la concejala de Territorio, Carmina Martinavarro, calificaron el avance del proceso como «histórico y definitivo para unas obras de las que se ha hablado durante años, pero siempre sin dar pasos determinantes como este, en que sale a concurso público el contrato con un presupuesto cerrado y reservado».

El plazo de ejecución de los trabajos es de 4,5 meses en una superficie total de 2.289,30 m2.

El procedimiento ha sido difícil por las características específicas de la Vila. De hecho, la Conselleria de Patrimonio solicitó un cambio en los materiales elegidos que ha sido atendido para lograr la uniformidad del barrio a través de la reforma. Las piezas del pavimento evitarán deslizamientos y caídas de peatones en un barrio donde actualmente residen muchas personas mayores.

El proyecto diseñado por un gabinete externo y supervisado por los técnicos municipales tiene en cuenta también la necesidad de compatibilizar las obras con la celebración de las fiestas, además de prever los usos posteriores de este pavimento que eliminará los peldaños y las aceras para facilitar la accesibilidad universal, uno de los principales propósitos de la reforma.

En la misma línea, la plaza de la Iglesia tendrá una iluminación especial junto a la fachada de la Natividad para resaltarla respecto a la calle San Joaquín. La plaza también contendrá dos zonas verdes con bancos y arbolado para la creación de espacios de reunión en este entrañable enclave.

Limitar el tráfico rodado a residentes, reordenar el entramado viario a una única altura y mejorar las canalizaciones son tres de los objetivos de la intervención, «una de las inversiones más cuantiosas de la legislatura que engloban unas obras complicadas por la configuración del barrio», explicó la concejala del área.