El desarrollo o la evolución de la economía rural hacia mejores niveles de vida, fundamentado en criterios sociales, ambientales y filosóficos, es el motor que impulsa la labor diaria de Sempreviva, una empresa castellonense nacida en 2020 que ofrece asesoramiento en este ámbito y que tiene como eje estratégico el interior de la provincia.

«Nuestro objetivo principal es ayudar a generar proyectos económicos de calidad, iniciativas con una base económica, social y ambiental, que hagan posible que nuestros pueblos de montaña generen riqueza, a la vez que mantienen el tejido social y el valor ambiental que tenemos», señala la gerente de la firma, Carmen Arnanz.

En base a estas premisas, el trabajo que desarrolla Sempreviva consiste en «allanar el camino a cualquier persona, empresa, cooperativa o colectivo que quiera comenzar una actividad, ampliarla o mejorarla», señala esta emprendedora. Para ello ofrece asesoramiento en diferentes campos, como la imagen corporativa, la tramitación de subvenciones, el plan de empresa, la dinámica de equipos en remoto o la definición del proyecto.

Excelencia y tecnología

Cabe señalar que dos ejes marcan cada acción de la firma castellonense: «la excelencia empresarial y el impulso del desarrollo económico y social de los pueblos del interior», indica Arnanz. En este sentido, la transformación digital juega un papel esencial, ya que «era una prioridad para cualquier pequeña empresa y, con la pandemia del covid-19, se ha convertido en una urgente necesidad. Quien no lleve a cabo una transformación digital de calidad lo tendrá muy difícil para competir, no ya en un futuro, sino ahora mismo», afirma Carmen Arnanz.

Un ejemplo de un nuevo modelo de negocio adaptado a las necesidades actuales es el proyecto Ruralco (en Culla) que, como señala la gerente, «constituye un ejemplo claro del modo en que se puede combinar naturaleza, trabajo en remoto, tecnología, transformación digital, juventud, actividad, tranquilidad y riqueza para cualquier población rural».

La situación derivada del covid19 ha supuesto también la renovación de los servicios de Sempreviva, que mantiene una evolución constante, para la transformación digital de microempresas. «Es una urgencia poner en marcha la transformación digital, como nos lo están pidiendo desde las instituciones europeas», señala.

Los nuevos servicios se amoldan a las necesidades de los clientes y son muy flexibles. Así, si una pequeña empresa tiene presencia digital pero está anticuada, la firma le ofrece implementar su web con una tienda online. Del mismo modo, si un establecimiento rural está reservando a través de plataformas externas de megaempresas internacionales, le pueden facilitar una gestión de reservas directas, compatible con las que ya tiene, para poder tratar con el cliente sin intermediarios, lo que mejora la experiencia del usuario y elimina comisiones.

Nuevo proyecto

En base a este espíritu de compromiso con el mundo rural, Carmen Arnanz lanzará, en septiembre, Menut.store, una plataforma que facilita y crea la transformación digital del pequeño comercio rural. «Nuestro foco está en el interior de la provincia, pero da cabida a cualquier microempresa que lo necesite, independientemente de su situación geográfica», explica.

En Menut.store los pequeños empresarios encontrarán todo lo necesario para despegar o afianzarse en internet con criterios de diseño, operatividad y posicionamiento excelentes. Uno de sus valores fundamentales será el trato personalizado y cercano, como ya ocurre en Sempreviva.consulting. «Somos de aquí, conocemos y valoramos lo que tenemos, y nuestra misión es ayudar a que el desarrollo rural de nuestra provincia genere vida, cumpla sueños, fije población y respete el maravilloso entorno natural que tenemos», concluye Arnanz.