El Ayuntamiento de Almassora presentó ayer las siete alegaciones al Plan de Acción Territorial (PAT) de Castellón impulsado por el Consell para solicitar formalmente la modificación del documento que afecta a la zona norte de la costa local, entre otros. El documento de 67 páginas redactado entre los técnicos municipales y el bufete externo contratado para el proyecto recoge las «determinaciones lesivas para el municipio».

En concreto, el consistorio abunda sobre siete aspectos «fundamentales» que solicita a la Conselleria modificar dentro de los plazos marcados por la legislación vigente, que fijan hoy como fecha límite para registrar las alegaciones. Entre esas solicitudes figura, en primer término, la configuración del perímetro de protección respecto del riesgo químico del polígono del Serrallo. Las alegaciones de Almassora consideran que dichas limitaciones «son exorbitantes, inmotivadas y se han adoptado sin el estudio de ninguna otra alternativa». «Es necesario corregir estas determinaciones y adecuarlas a la realidad de la zona», consideran.

También abordan las competencias locales en materia de planeamiento. No en vano, el Ayuntamiento abunda en que el plan de la Conselleria «atenta a la autonomía local» en tanto que «se excede de las previsiones de la normativa urbanística y condiciona la ordenación pormenorizada». Además, el documento municipal señala errores en la clasificación y calificación del suelo.

SUELO NO URBANIZABLE / Las alegaciones son críticas también respecto al suelo no urbanizable al entender que «el PAT confunde el deseo y objetivo compartido por el Ayuntamiento de fomentar la actividad agrícola con la medida propuesta para conseguirlo, a base de restringir los usos».

De igual modo, las alegaciones urgen a reflexionar sobre la necesidad de mejora de las infraestructuras existentes y sus condiciones de integración, así como con las que está prevista su ejecución, «de forma que no supongan una nueva barrera sino que, al contrario, su implantación permita la dinamización económica y social, la mejora de las comunicaciones» y también que den soluciones a la problemática que genera su implantación «y minimicen las afecciones existentes en el territorio».

El apartado quinto está centrado en la necesidad de alternativas en el plan sin desclasificar suelos urbanizables y con un mayor consenso de todos los agentes locales implicados. Esta desclasificación propuesta en el PAT, indica el texto, «afecta en grado elevado al modelo territorial aprobado por el PGOU vigente y obliga, casi con toda seguridad, a su revisión».

Cierra las alegaciones de Almassora la ausencia de estudios económicos, «una carencia muy grave», según el documento municipal, «que por sí sola invalidaría la tramitación actual, debiendo el órgano promotor redactar esos estudios económicos obligatorios según la legislación vigente y volver a exponer al público la versión preliminar», recogen.