El Ayuntamiento de Vila-real se ha visto obligado de nuevo, y al igual que ocurriera con el mantenimiento de zonas verdes del municipio, a licitar y adjudicar un contrato para mantener en condiciones idóneas la señalización de la ciudad, tanto la vertical como la horizontal, como consecuencia de que la escasez de personal propio del departamento de Servicios Públicos impide acometer estas labores, como consecuencia de la merma de operarios en este área.

En este caso, la empresa Maquiver, SL ha resultado ser la adjudicataria de esta contratación, que salió a licitación por un importe de 348.480 euros (IVA incluido) para cuatro años --dos iniciales más otros dos de posibles prórrogas-- y que ya se ha traducido en la presentación de una primera factura de 16.000 euros.

En concreto, y según han informado a Mediterráneo fuentes de la Concejalía de Seguridad Ciudadana, «se presentaron un total de nueve empresas, algunas ubicadas en la provincia y otras de fuera de ella». Finalmente, el contrato se adjudicó por 301.434 euros --prórrogas incluidas--, lo que supone una rebaja del 13,5%.

Uno de los aspectos que destacan en la nueva contrata es el de las mejoras que la firma que asume los trabajos incluyó en su oferta. Así, se instalarán otros tres radares informativos y que permiten recopilar los datos de aforo de los viales, que serán portátiles y que se colocarán por un plazo de tiempo determinado en distintos puntos de la ciudad, ya que lo único que precisan es una toma de electricidad. Los radares serán de similares características a los que ya están en funcionamiento en la avenida Europa y en la calle Ermita y que informan a los conductores de la velocidad a la que circulan y si esta rebasa los límites establecidos en estas vías.

RENOVACIÓN // A parte de las labores de mantenimiento ordinario de señales horizontales y verticales, una de las intervenciones que se incluyen en el plan de actuación es la renovación casi total de parque de educación vial existente en el parque de la Panderola, frente al colegio Carlos Sarthou. Un parque que ha sido y sigue siendo un referente en esta materia y que, indican las mismas fuentes, «necesita una reforma en profundidad, de manera que, entre otros aspectos, se incluirá un carril bici en su recorrido, porque este tipo de viales están creciendo y son ya de uso cotidiano».

En cualquier caso, desde el departamento de Seguridad Ciudadana explican que los primeros trabajos y aquellos que seguirán hasta finalizar el año, se centran en el repintado de los pasos de peatones que dan acceso a los colegios de Vila-real, a la vez que también se priorizan los de viales como la antigua N-340 --Sant Manuel, Joan Baptista Llorens y Castelló-- y las avenidas Francesc Tàrrega, La Murà, Pius XII, França o Alemanya, por cuanto el intenso tráfico que hay en ellas provocan un importante desgaste de la pintura y, en consecuencia, una menor visibilidad de los pasos, lo que genera riesgo para los peatones.