Crónica de un destrozo anunciado. Filomena, como ya lo habían hecho anteriormente Gloria y un sinfín de temporales, destapó una vez más las vergüenzas y las carencias de la costa de Castellón, especialmente el litoral sur, que demuestra una vez más la necesidad urgente de unas obras de defensa que sirvan para proteger las playas de forma duradera y eviten que la nueva borrasca de turno provoque un reguero de desperfectos.
La limpieza se centró ayer en despejar el paseo en Almassora.
Unos desperfectos que este lunes los municipios se apresuraban en arreglar, donde las máquinas y los operarios invadieron los arenales y los paseos marítimos para tratar de revertir cuanto antes los efectos que ha dejado el intenso oleaje del último fin de semana.
Una de las localidades donde Filomena se ha dejado notar en la costa es Moncofa, cuyo alcalde, Wences Alós, no oculta su indignación con el Gobierno por «seguir dejando abandonado» el litoral sur de la provincia. «Son demasiados los ejemplos para demostrar la necesidad urgente de actuar, no podemos consentir más retrasos», critica, y reprocha que solo haya presupuesto de ejecución para el tramo de Almenara-la Llosa.
Los operarios de Moncofa comenzarán este martes a reparar el litoral.
Unos trabajos de defensa en todo el litoral sur para los que, según calcula Alós, el Ejecutivo debería invertir «20 millones de euros anuales, es decir, de 80 a 100 millones, para proteger toda la costa».
Compensación económica
En Nules, su alcalde, David García, coincide con la postura que defiende su homólogo de Moncofa, aunque su determinación para buscar una compensación por los años de «desamparo y abandono» del municipio por parte de la Administración se constató recientemente tras iniciar un procedimiento inédito, por el que el consistorio exige una indemnización por los efectos que la construcción del puerto de Burriana ha tenido en su costa.
Las actuaciones en la costa de Almenara están previstas para los próximos días.
Almenara es otro de los puntos habituales del litoral con nuevos destrozos cada vez que se produce un temporal. Filomena así lo volvió a reflejar, como recrimina su munícipe, Estíbaliz Pérez, aunque no es la única esta vez en alzar la voz. Por ello, el presidente de la plataforma en defensa del litoral del municipio, Cristóbal Gómez, pide «celeridad» en la adjudicación del proyecto de los espigones, ya que, «tras muchos años de espera», hace un mes desde que abrieron el sobre económico de las empresas y aún no saben «nada», indicó.
En Peñíscola, más allá de reponer las estructuras dañadas, como el mobiliario de las playas o los lavapiés, desde el consistorio adelantan que volverán a plantear a Costas, aunque les han respondido muchas veces que no es la solución técnica, que valore «la construcción de algún espigón para frenar de alguna forma la fuerza con la que el mar golpea la costa». «Hay muchos municipios que sí los tienen y parece que tienen su efecto», arguyen.
El área de Servicios organizó un dispositivo especial de limpieza en Peñíscola.
Día 1 tras el temporal
Así, la tregua que dio este lunes Filomena permitió que los ayuntamientos se pusieran enseguida manos a la obra para arreglar los desperfectos. En Vinaròs, la brigada y la empresa Acciona limpiaron el sedimento y las piedras acumuladas en el tramo sur del paseo marítimo y la playa del Fortí, al igual que en Benicàssim, donde los operarios municipales empezaron a adecentar la pasarela del Eurosol, entre otros puntos.
El temporal marítimo afectó especialmente en Vinaròs al tramo sur del paseo.
En Almassora, los primeros trabajos consistieron en despejar el paseo, en Benicarló en eliminar la acumulación de agua en la Ratlla del Terme y limpiar el arenal de la Caracola, y en Burriana abrieron la Gola del Clot de la Mare de Déu para drenar el agua y retirar piedra y arena en les Terrasses.
Una máquina desarrolló trabajos en Surrach, en Benicarló.
En Orpesa, además de tareas de limpieza, los técnicos ultiman los pliegos para licitar un estudio que aporte soluciones a largo plazo contra la regresión de la costa. En Cabanes, el PP se hizo eco del malestar de los vecinos de la Ribera para proteger la playa de Torre la Sal. Informan E. Bellido, M. J. Sánchez, X. Flores e I. Calpe.
Los operarios municipales se activaron ayer a primera hora en Orpesa.
