El área de Cultura de Peñíscola presentó un escrito al Ministerio de Política Territorial y Función Pública en el que solicita adherirse al Circuit Cultural Valencià. El departamento que dirige Ramón Simó registró la petición ante el ministerio y no ante la Generalitat porque desde la sede electrónica del Institut Valencià de Cultura (IVC) era imposible formularla. Mientras siguen la espera de reunirse con la dirección del IVC para tratar el uso del Palau de Congressos.
Este es el primer trámite que el equipo de gobierno ha realizado para dejar constancia de su intención de formar parte del proyecto de cooperación interinstitucional que propicia el IVC con los ayuntamientos que aspiran a presentar una programación variada y de calidad.
El tema será elevado al pleno para su aprobación en la próxima sesión y, posteriormente, el consistorio remitirá el acuerdo alcanzado para formalizar la adscripción y la modalidad. El ejecutivo local optó por remitir la solicitud después de barajar esa posibilidad en la última reunión que el alcalde, Andrés Martínez, mantuvo con el equipo del área de Cultura, con la finalidad de abordar las novedades en la agenda anual.
El munícipe explica que el objetivo es «tratar de desbloquear la ausencia de programación de actos en el Palau por parte del Consell» y destaca que, de los 88 ayuntamientos adheridos , solo Peñíscola programaría, si les autorizan, en un espacio de la Generalitat. «Más no pueden pedirnos», comenta.
Costes
De prosperar la petición, el consistorio se comprometería a costear algunos de los actos de la agenda y, de hecho, está estudiando dedicar una consignación presupuestaria para hacer frente a este gasto. «Financiaremos parte de la programación, pero no vamos a dejar de exigir que la Generalitat programe en el Palau porque es su competencia y su responsabilidad», reivindica el primer edil.
Mantenimiento
Asimismo, insta al Consell a acometer «con urgencia y seriedad» el mantenimiento y mejora de la instalación. «Merecemos un edificio en condiciones para dinamizar actividades y congresos que se pueda desarrollar en el recinto, no basta con que se limiten a poner parches», dice. El equipo de gobierno ha denunciado en reiteradas ocasiones el «abandono» del Palau por parte de la Generalitat y el «agravio comparativo» que impone a Peñíscola, donde no programa actividades y contrasta con la agenda cultural que aplica en otros espacios de su titularidad.
