Los vecinos de la Colonia Segarra, en la Vall d’Uixó, notarán una mejora sustancial en la presión del agua potable en breve, en cuanto finalicen las obras de renovación de la red de canalizaciones que está ejecutando la empresa Facsa.

En realidad, como explicó la concesionaria, la intervención afectará a las conexiones de las tuberías existentes, que serán sustituidas para «garantizar una distribución de presiones óptima y un control de los volúmenes de agua suministrada mucho más preciso». Una adecuación que quedará lista «en los próximos días».

Para conocer in situ los detalles de las obras, el Ayuntamiento realizó ayer una visita oficial a los trabajos en la que estuvieron la alcaldesa, Tania Baños; y el concejal de Urbanismo, Javier Ferreres. Sobre el terreno, los representantes de la empresa les explicaron que el proyecto incluye «la integración de la válvula reguladora de presión y el contador en el telemando del abastecimiento», para ello, van a poner en marcha «una estación de telecontrol con módem de comunicaciones GRPS». 

Modernización del sistema

El recurso a las nuevas tecnologías supone un importante avance, porque permiten «la monitorización remota de los datos de control y funcionamiento de la instalación, así como la gestión de anomalías que se puedan producir».

Lo que se persigue con el telecontrol es asegurar una «detección temprana de las fugas», lo que contribuye, según la concesionaria, «avanzar en la implementación de soluciones enfocadas a mejorar los indicadores de eficiencia y sostenibilidad del servicio de abastecimiento».

A este respecto, la alcaldesa remarcó que esta apuesta por la modernización de los servicios públicos «nos hará más eficaces y dará una solución a los problemas de presión insuficiente que sufren algunas zonas del barrio, sobre todo en las cotas más altas o en las horas de punta de consumo».

Además de la renovación de la red, como es obvio, los trabajos incluyen la obra civil, es decir la apertura y reposición de zanjas o la construcción de arquetas enterradas, así como la instalación de nuevas tuberías y válvulas.

Actualmente, Facsa está ejecutando varias intervenciones de envergadura en la Vall. A la de mejora del suministro en la Colonia Segarra hay que sumar la de la calle Xacó, un proyecto de especial importancia para el Ayuntamiento, como ha defendido en más de una ocasión la alcaldesa, Tania Baños, porque además de cambiar la totalidad de la red, supondrá una renovación de un vial que conecta el barrio Carbonaire con el centro, modificando el diseño urbano para hacerlo más accesible, dotando de mayor protagonismo y prioridad a los peatones.