Tras años de reivindicaciones, las históricas obras para ampliar la plataforma y reordenar los accesos de la carretera N-238 ya están en marcha en Vinaròs, con el movimiento de tierras y adecuación de terrenos colindantes. Los trabajos en la conocida como carretera de Ulldecona abarcan del km 2,500 al 8,750, desde la capital del Baix Maestrat hasta el enlace con la AP-7, y tienen un presupuesto de 12,81 millones de euros que financia el Gobierno central.

Las tareas tienen un plazo de ejecución de 30 meses, por lo que la previsión que maneja el Ayuntamiento es que la actuación pueda ser una realidad en el 2024.

8.900 vehículos pasan al día por esa carretera

El tramo que comprende las obras se sitúa entre el enlace con la carretera N-340, que sirve de variante de Vinaròs y Benicarló, y la conexión con la AP-7. Presenta un trazado rectilíneo, con una calzada de dos carriles de 3,50 metros cada uno, sin arcenes y en muchos tramos sin bermas, y con accesos directos en ambos márgenes. Y absorbe unos 8.900 vehículos que circulan al día, 1.400 de ellos pesados.

Coches circulan por la N-238, este viernes, que sufrirá una sensible mejora.

El proyecto, según expone el Ministerio de Transportes, tiene un doble objetivo: incrementar la seguridad y mejorar la conexión de la AP-7 con la red viaria del Baix Maestrat, en especial con la N-340, la CV-11 y la CV-101, que sirve de acceso a Alcanar (Tarragona).

Construirán arcenes

La actuación consiste en ampliar la plataforma de la N-238, entre el enlace de la AP-7 y el de la N-340 en una longitud de unos 6,5 kilómetros, dotándola de dos carriles de 3,50 metros de ancho, arcenes de 1,5 metros y bermas de un metro. Asimismo, harán un control de accesos mediante la construcción, en ambos márgenes de la carretera, de caminos de servicio que conectan con la N-238, a través de los tres enlaces del tramo, lo que permitirá suprimir los actuales vínculos directos a la N-238.

El Ministerio prevé realizar también un nuevo enlace con la CV-101 (km 5,500) y mejorar la intersección con la AP-7. Además, contemplan cuatro estructuras (las del enlace citado y el cruce sobre el barranco Barbiguera) y dos pasos inferiores bajo la carretera para garantizar la continuidad de las vías pecuarias afectadas.

Completarán la actuación con la rehabilitación del firme del tramo, la señalización y balizamiento, la reposición de servicios afectados y la instalación de báculos de iluminación en el perímetro de las glorietas del enlace y los intervalos adyacentes de los ramales.

Valoración municipal

El alcalde, Guillem Alsina, no ocultó su satisfacción por el inicio de estas obras tan esperadas, especialmente por los vecinos que pasan por la N-238 a diario para ir a trabajar a los polígonos instalados en el entorno o acceder a poblaciones vecinas como Ulldecona, Alcanar o la Sénia. «Esta inversión del Estado va a mejorar la seguridad de una carretera que ha sido un auténtico peligro para nuestra gente», dijo.