Los parques eólicos son, tres lustros después, uno de los principales recursos generadores de empleo en la comarca de Els Ports. Los alcaldes, salvo por una excepción, esperan que la ampliación para crear cinco nuevos parques se materialice lo más pronto posible, ya que, señalan, los aerogeneradores son fundamentales para luchar contra la despoblación.
«Trabajamos para que las ampliaciones sean una realidad cuanto antes, porque desde el Ayuntamiento apostamos decididamente por los parques eólicos»
La postura mayoritaria es la que defiende, por ejemplo, el munícipe de Morella, Rhamsés Ripollés, quien reivindica que apuestan «decididamente» por los parques: «Ahora trabajamos para que las ampliaciones sean una realidad cuanto antes». La empresa encargada de hacerlo posible, Renomar, prevé sumar cinco parques a la zona, con una inversión de más de 130 millones de euros. En ellos, instalarán 44 nuevos aerogeneradores, de los que 12 estarán en el término municipal de Morella.
Apuesta de futuro
«Para nosotros los proyectos son una apuesta de futuro en la consolidación de la población y de los puestos de trabajo, incluso tendremos formación específica en el IES»
En la misma línea se expresa la alcaldesa de Vilafranca, Silvia Colom, quien expone que, para ellos, «son una apuesta de futuro en la consolidación de población y puestos de trabajo». Tanto es así que el próximo curso generarán oportunidades laborales con la puesta en marcha del módulo de energías renovables en el IES Vilafranca. En su caso, son 11 los nuevos molinos previstos.
«Tenemos jóvenes en nuestro pueblo que decidieron quedarse a vivir aquí porque encontraron trabajo en los parques y ahora lo notamos en los alumnos del colegio»
Incluso en municipios donde no se ha anunciado instalación alguna son favorables al proyecto. Por ejemplo, Cinctorres. Su alcaldesa, Mireia Mestre, destaca su importancia porque tienen jóvenes del pueblo que decidieron quedarse a vivir porque encontraron trabajo en los parques, «una decisión que ahora notamos con la entrada de nuevas generaciones de estudiantes en la escuela», afirma.
«Nosotros lo tenemos muy claro, aquí dan trabajo y movimiento económico. El bar y el hotel son viables, en gran medida, por la gente que trabaja en estos parques»
A favor también están los munícipes de Olocau del Rey y la Todolella, Santiago Gazulla y Víctor Milián, que en el futuro tendrán siete y 10 aerogeneradores, respectivamente. «Nosotros lo tenemos muy claro, aquí los parques dan trabajo y economía», dice Gazulla, que además expone: «El bar y el hotel son viables, en gran medida, por los trabajadores de los parques».
«Las instalaciones de las renovables, la atracción y la creación de nuevas empresas nos tienen que guiar, porque no podemos fiarlo todo al sector primario ni al turismo»
A la pregunta sobre qué supone para su municipio esta propuesta, Milián tampoco tiene dudas. «Los parques de renovables, la atracción y creación de nuevas empresas nos tiene que guiar, no podemos fiarlo todo al sector primaria y al turismo», subraya.
Esta es una opinión compartida en Ares, Castellfort y Portell, donde hay planificados 11 molinos entre los dos primeros y cuatro en el tercero, aunque en su caso introducen un matiz relevante, como el de la necesidad de «preservar nuestros valores ambientales y paisajísticos» y velar al máximo «por el cuidado del territorio».
«Es cierto que en nuestro pueblo no hay nadie que esté trabajando allí, pero es una realidad que están generando mucho trabajo en la comarca, y eso es muy positivo»
En concreto, la máxima representante municipal de Castellfort expone que los cinco molinos de su término municipal están a escasos 950 metros del casco urbano. «Provocan mucha afección visual, han desconfigurado el paisaje», dice, aunque, a la hora de valorar los beneficios, reconoce que «para el trabajo ha sido muy bueno», a pesar de que ninguno de sus vecinos trabaja en el sector, pero tiene en cuenta el impacto laboral en la comarca. En cuanto a futuras ampliaciones, matiza, «muchos más no sería necesario», aunque insiste en que «en general, es positivo».
La muy alta tensión
Un respaldo general que, en contrapunto, en todos estos municipios no les hace descuidar la amenaza que puede suponerles la línea de muy alta tensión (MAT) que la empresa Forestalia pretende instalar atravesando la provincia para suministro de los parques de Teruel.
«La parte positiva son los fondos de compensación y que un vecino está trabajando en los parques, pero los beneficios deberían ser más por tener las infraestructuras»
En ese aspecto centra su valoración el alcalde de la Mata, donde no habrá aerogeneradores, pero sí afección por las torres eléctricas del trazado. Jorge Royo señala que en su pueblo «solo» tienen a un vecino trabajando en los parques, lo que, junto a los fondos de compensación, es «la parte positiva». Pero reivindica que «deberían ser más los beneficios que recibiésemos por estas infraestructuras».
«Estos proyectos invitan a la reflexión de si debemos caminar hacia un modelo diferente como, por ejemplo, las comunidades energéticas locales con placas solares»
Entre las voces discordantes está la del alcalde de Villores, Iván Guimerà, que si bien clarifica su apuesta por las renovables, invita a la reflexión sobre la necesidad de alejarse de los grandes parques eólicos y caminar hacia «un modelo energético diferente».
Según sostiene, para su municipio, que no tiene ningún molino, suponen «contaminación visual, sonora y paisajística, y las indemnizaciones solo podemos gastarlas en obras, cuando nos gustaría priorizar los servicios o la contratación de personal». Su apuesta pasa entonces por crear «comunidades energéticas locales y aprovechar las cubiertas de los edificios para poner placas solares».
En definitiva, a la hora de poner en una balance las ventajas y los perjuicios, parece que pesen más las primeras en una zona donde los recursos económicos y las alternativas son escasos.
