Aunque aún faltan cuatro meses y medio, Burriana ya mira de reojo en el horizonte el regreso de las Fallas, después de que el lunes resolvieran la gran incógnita y fijaran una fecha para realizar la fiesta: del 8 al 12 de octubre. Pese a que todavía queda hasta entonces, la intención del Ayuntamiento es comenzar a reunirse para planificar y diseñar la programación, siempre con actos adaptados a la pandemia, a partir de junio, ya que primero quieren acabar de perfilar las Cruces de Mayo, que celebrarán el último fin de semana de este mes.

Son los plazos que maneja la concejala del área y presidenta de la Junta Local Fallera (JLF), Sara Molina, que reivindica que el acuerdo para marcar una fecha supone «un antes y un después» para el sector tras «tanto sufrimiento». Si bien aún tienen que empezar a trabajar para definir «cómo y de qué manera» serán las actividades en Fallas, hay actos ineludibles que ya están programados. Entre ellos, la edila confirma que la plantà de los ninots (cada una de las 19 comisiones plantará su monumento) será el 8 de octubre; la entrega de los premios falleros, el 9; y la cremà, el 12.

Otra ceremonia que realizarán «sí o sí», aunque sin marco temporal por el momento, es la ofrenda, cuyas condiciones «dependerán de la normativa sanitaria que haya entonces». Otros actos característicos como la Crida o el Pregó no tienen previsto realizarlos, ya que, puntualiza Molina, ya los llevaron a cabo en 2020, antes de la eclosión de la pandemia. «Los que retomaremos en octubre son los que nos quedaron pendientes y no pudimos hacer el año pasado», argumenta.

¿Cuándo será la elección de las nuevas reinas?

Dos jóvenes que llevaban meses y meses a la espera de conocer cuándo podrían disfrutar de la fiesta en su año son las reinas falleras del 2020, Elena Pastor y Julia López, que por fin ven ya ese sueño, interrumpido por la pandemia, plasmado en el calendario. Aunque en tiempos precovid ya solían dar a conocer en verano las máximas representantes josefinas del ejercicio siguiente, en esta ocasión la elección será una vez acaben las Fallas, a partir de mediados de octubre, «cuando Elena y Julia hayan podido disfrutar de su reinado». 

Quien también aplaude saber ya la fecha es el presidente de la Federació de Falles, Salvador Doménech, que apela a la «prudencia» y remarca que llevan meses trabajando en un protocolo que minimice el riesgo de contagios. Algunas de las «líneas maestras» es que cada comisión deberá tener un coordinador covid que «vele por el cumplimiento de las normas sanitarias y controle la gente que acude a los actos». Además, todas las carpas que se instalen en Fallas serán abiertas al aire libre, anunció, para garantizar una mejor ventilación.

Por otra parte, Benicarló celebró este martes por la noche otra reunión para intentar llegar a un acuerdo sobre cuándo celebrar las Fallas y decidir qué comisiones plantarán finalmente.

«Que nadie piense que serán unas Fallas a tope»

«Que nadie piense que a partir de septiembre va a haber Fallas a tope, no habrá actividades masivas». Es el aviso que lanzó este martes la secretaria autonómica de Salud Pública, Isaura Navarro, sobre cómo será el regreso de las fiestas josefinas en la Comunitat tras el verano, y dejó claro que «no van a ser como la gente las tiene en la retina, sino actos controlados». «Serán sobre todo para el sector fallero, no tanto para la gente de fuera», añadió. Una celebración popular que cancelaron son las Hogueras de Alicante, tras el rechazo de las comisiones a realizarlas en pleno otoño.