Incorporación de renombre para la colección del futuro Museu del Bou de Burriana. La Fundación Satine, impulsora del proyecto, ha comprado todas las piezas que conforman el Museo Taurino de Jerez, por lo que todos sus atractivos formarán parte y se trasladarán íntegramente al recinto, actualmente en obras, que están acondicionando en la localidad castellonense.
De esta forma, tal como remarcan desde la propia empresa, el inminente templo taurino de la provincia (y primero de estas características en la Comunitat) acogerá "una de las colecciones museísticas españolas de temática taurina más importantes del mundo", en un guiño para salvaguardar uno de los patrimonios culturales más relevantes de todo el país.
El objetivo, concretan, es integrar el Museo Taurino de Jerez dentro de la columna vertebral del Museu del Bou, algo que "obliga a reestructurar de nuevo la distribución inicial del Museu". Por ello, aunque la previsión inicial era inaugurar el recinto en septiembre, coincidiendo con las fiestas patronales de la Misericòrdia, tras esta incorporación de postín para la colección del espacio, "ahora no se descarta posponerla para más adelante".
Piezas que datan desde el siglo XIX
Para Satine, no aportar los elementos necesarios para salvaguardar esta colección museística que compone el Museo de Jerez "sería una afrenta a la tauromaquia", por lo que la decisión de adquirir dicha colección se ha tomado "de forma inmediata".
No en vano, la muestra jerezana está compuesta por importantes piezas de indumentaria taurina, cartelería, fotografías inéditas, oleos y esculturas que datan desde siglo XIX.
Desde la compañía reivindican que esta operación no hubiera sido posible "sin la predisposición y confianza depositada, por la familia jerezana", Rodríguez-Alvarez e hijos, que han apostado por el proyecto.