Entre el grupo de vecinos de Vallibona que ha realizado hoy el clásico esmorzar de todos los viernes se ha colado un invitado especial que, no obstante, parecía un habitual de las quedadas gastronómicas de cada semana. Se ha tratado ni más ni menos que del president de la Generalitat, Ximo Puig, quien, aprovechando que no había pleno del Consell, ha pasado la mañana en esta localidad de Els Ports de solo 66 habitantes para cumplir su «deuda pendiente», como él mismo reconoce.

«Hace seis años, antes de las elecciones (las autonómicas del 2015), estuve aquí y dije que volvería como president de la Generalitat a un almuerzo», explicó Puig, y puso en valor que son ágapes que generan «convivencia, ilusión y alegría».

El president, Ximo Puig, rodeado de vecinos de Vallibona, entre ellos el alcalde, Juan José Palomo. Mediterráneo

El líder autonómico reivindicó que el municipio tiene «un patrimonio natural extraordinario», aunque remarcó que «lo más importante de Vallibona es el patrimonio de su gente». «Una gente que durante años ha estado trabajando para mantener el pueblo, liderados por un alcalde joven e ilusionado (el socialista Juan José Palomo), que ha hecho posible que la población tenga esperanza de futuro», aseguró.

Superar el desequilibrio territorial

Puig afirmó que su objetivo es que «toda la Comunitat supere el desequilibrio territorial» y que «la despoblación no sea un mal necesario», sino que «haya posibilidades de recuperar ese pulso social» que necesita el interior.

Puig pasea por una de las calles de Vallibona, este viernes. Mediterráneo

«Si los pueblos se despueblan, perdemos toda la Comunitat. Por ello, necesitamos una autonomía equilibrada y en la que el patrimonio cultural y natural que atesora nuestro interior continúe con toda la fuerza que le da la presencia de las personas», aseveró ayer el president.

Como clave para revertir ese éxodo hacia las ciudades, Puig lo tiene claro. «Necesitamos que el espacio rural tenga la atracción de los jóvenes para que se queden aquí», subrayó. Y, para ello, hace falta «empleo» y «una cultura que acerque el conjunto de la ciudadanía a los pueblos».