El palacete de Villa Elisa en Benicàssim tendrá un restaurante a finales de este año. El Ayuntamiento ha adjudicado la concesión para el uso privativo de esta cafetería a Guillermo Arnal Jericó, un empresario benicense que ya tuvo concesiones administrativas en el Grao.

La adjudicación se ha producido por un canon de 20.000 euros y uno variable del 5% sobre los ingresos de la actividad a partir del segundo año de la concesión, según informaron fuentes municipales. Asimismo, el permiso es por 10 años ampliables anualmente por cinco años más, es decir, podría llegar a un total de 15.

Pero para poder abrir este nuevo establecimiento en la parte trasera de la parcela del recinto será necesario realizar unas obras, que está previsto que comiencen «en el mes de septiembre», según indicaron las mismas fuentes. Con todo, su apertura y puesta en funcionamiento podría ser una realidad para finales del 2021, según el calendario fijado.

La de este empresario fue la única propuesta que recibió el Ayuntamiento en el proceso de licitación de Villa Elisa, aunque sí que fueron más emprendedores los que mostraron su interés en gestionar este restaurante. Además, se ofrecieron visitas para ver el espacio donde se ubicará.

Según las condiciones marcadas por el consistorio, la propuesta gastronómica global tiene que ser atractiva y en consonancia con el entorno donde se ubica, ya que la parte destinada a la cafetería-restaurante se encuentra dentro de un enclave especial, con un atractivo extraordinario. Por lo tanto, su oferta culinaria, su diseño y decoración deben ser coherentes entre ellos a fin de resaltar las posibilidades de este edificio tan emblemático del municipio.

Mantenimiento

La gestión incluirá la prestación del servicio, así como la conservación de las instalaciones y las reformas de adecuación y reparación ordinarias propias del deterioro normal producido por el uso, que sean exigibles en relación a los elementos que han de reunir para mantenerse aptas a las exigencias sociales.

Además, cualquier actuación sobre las instalaciones o reformas interiores ha de ser puesta en conocimiento del Ayuntamiento, que deberá aprobar el correspondiente proyecto de actuaciones presentado por el concesionario, cuando sea exigible conforme a la normativa de aplicación. Con todo, se estima una inversión inicial mínima para la puesta en funcionamiento de la cafetería-restaurante de 40.000 euros, como indican desde el consistorio.

Mayor atractivo

La alcaldesa de la localidad, Susana Marqués, destaca que «con esta intervención damos un paso más por sumar un servicio atractivo al palacete municipal de Villa Elisa y desde el Ayuntamiento de Benicàssim seguimos trabajando porque este lugar emblemático sea todo un referente en la cultura, el arte, el conocimiento y el turismo».