El alcalde de Figueroles, Luis Gregori, los concejales Óscar Escrig y Sergio Bellés, y representantes de la empresa Equipe Cerámicas, el director de márketing, Juan Murillo, y el director de operaciones, Joaquín Pitarch, presentaron la reformada y renovada piscina municipal de la localidad.
El acto de inauguración sirvió para mostrar la conclusión de las obras de rehabilitación de los vestuarios del complejo deportivo, cuyos azulejos han sido donados desinteresadamente por esta compañía local. La remodelación también afectó al vaso de la piscina y al contorno de la misma, con nuevo césped que ha sustituido al antiguo e incómodo suelo, y nuevas escaleras --una adaptada para gente con dificultades de movilidad-- para acceder al interior de la piscina. Cabe destacar que antes de las actuaciones, los vestuarios aún tenían el techo de uralita y solo se contaba con una ducha para todos los usuarios del recinto.
Las intervenciones, que concluyeron hace unas semanas, han dotado a la piscina de tres vestuarios adaptados, con múltiples duchas y espacios para cambiarse.
Plan 135 de la Diputación
Los trabajos de mejora han sido sufragados con dos ejercicios del Plan 135 de la Diputación de Castellón para ayudar a los ayuntamientos. Concretamente, en dos anualidades, 2019 y 2020, con 75.560,51 euros cada año, por lo que el total asciende a 151.121,02 euros. El primer ejercicio se ejecutó la reforma de los vestuarios y en el segundo lo enfocado a la depuradora, red de tuberías y el cambio de césped.
El primer edil valora "muy positivamente" las obras, "tan necesarias y primordiales para nuestra piscina municipal. El año pasado por la crisis del covid permaneció cerrada, pero este 2021 esperamos que con prudencia y sentido común, aún por la pandemia, podamos disfrutarla como merece".
El historiador local, Amadeu Porcar, recuerda que un 20 de junio de 1968 el alcalde, Enrique Gil Rubio, propuso crear un complejo deportivo. El 19 de julio del mismo año empezaron las obras, de las que se cumple el 53° aniversario. El proyecto constaba de dos piscinas, un bar y una explanada para aparcar. El Ayuntamiento no tenía bastante dinero y pidió ayuda a la Junta Provincial de Educación Física y Deportes. La Diputación aportó 250.000 pesetas. El resto lo dieron los vecinos con acciones. La apertura fue en 1969.
