Si se trata de sensibilizar a la ciudadanía en general sobre la riqueza del patrimonio arquitectónico, cultural y social de las playas de Nules, la iniciativa llevada a cabo ayer en la localidad es un indicio de que van por buen camino. Decenas de personas respondieron a las diferentes convocatorias de la jornada de patrimonio que tuvieron al faro como protagonista.

Lo que sucedió ayer es, en palabras de los organizadores, «como si Gaudí visitara su obra» y lo compartiera con quien quisiera acompañarlo. Porque Blanca Lleó, arquitecta autora del diseño del emblemático faro de Nules --construido en 1998-- participó activamente en las citas en torno a su obra. Sin duda, la más vistosa fue la dirigida a un público más familiar. Las mesas preparadas para participar en el taller para reproducir en un recortable esta distintiva construcción se quedaron pequeñas para acoger a todos los que se animaron a participar. El balance del público resulta contundente: «Ha sido una iniciativa muy buena», señaló a este diario una de las asistentes. Y así, de manera casi anecdótica, pero en el fondo muy bien planificada, todos conocieron un poco mejor el paisaje urbano con el que conviven y comprendieron que es indispensable protegerlo.

Protección integral

Al fin y al cabo, esta es una más de las iniciativas impulsadas por el Ayuntamiento en colaboración con la plataforma Platges de Nules, para demostrar que cuando reivindican la protección de su litoral, están pidiendo proteger su historia y el legado patrimonial.

Blanca Lleó, además de subir a lo alto del faro con autoridades como el presidente de la Autoridad Portuaria de Castelló, Rafael Simó o el presidente del Colegio de Arquitectos, Ángel Miguel Pitarch, también realizó una charla --con aforo completo-- junto a los arquitectos locales Jaime Prior y Manolo Miralles, y el investigador del patrimonio Miguel A. Sanz.