El Ayuntamiento de Benicàssim refuerza sus acciones para la mejora de la movilidad y la seguridad viaria en distintos puntos del municipio con la instalación de radares para el control de la velocidad. 

Como ha explicado la alcaldesa, Susana Marqués, “los dispositivos instalados cumplen una doble finalidad. Por un lado la de informar y por otro la de concienciar a los conductores de ir adecuando su velocidad en ciertas zonas de afluencia ya sea en entorno de colegios o rectas que puedan incitar a la velocidad”. La alcaldesa ha indicado que “esta acción se suma a otras destinadas a mejorar la seguridad y movilidad de los vecinos para poder ofrecer una ciudad cómoda, amable y segura”. 

La urbanización Montornés y el acceso al CEIP Palmerar (avenida Mohíno) son las dos zonas escogidas para la colocación de dos radares “que se suman al que ya opera desde principios de año en la avenida Barcelona. Nuestro objetivo es una movilidad más sostenible e inteligente”, ha comentado el concejal de Movilidad, Carlos Díaz, quien ha añadido que “los radares se han instalado en distintos puntos del municipio atendiendo a las demandas vecinales recibidas a través de la participación ciudadana”.

Por su parte, la concejala de Seguridad, Natividad Alonso, ha dicho que “se han escogido tres emplazamientos en tres zonas diferentes del municipio, zona sur, urbanizaciones y zona norte, para poder controlar la velocidad en tres rectas en las que se suele superar la velocidad establecida por las señales de tráfico y que, además, son puntos sensibles, como el caso del acceso al colegio Palmerar”. 

Los radares tienen el objetivo de advertir a los conductores de la velocidad a la que están circulando y, en el que caso de que sea superior a la permitida, que la reduzcan. El radar marca los kilómetros por hora a los que se circula y da las gracias a aquellos conductores que la cumplen y circulan por debajo de ésta.