La presentación del proyecto de recuperación de la torre de Benissahat de la Vall d’Uixó se convirtió en la noche del viernes en un sorprendente espectáculo cultural con el que el Ayuntamiento quiso trasladar a la ciudadanía la relevancia que tiene su recuperación para el patrimonio local.

La parte principal del evento organizado en la plaza de la Asunción, a pocos metros de la construcción recientemente adquirida por el consistorio, consistió en ofrecer detalles sobre el proyecto de restauración diseñado por el equipo técnico de El Fabricante de Esferas, que tiene como propósito garantizar la conservación de la torre, declarada bien de interés cultural (BIC), y convertirla en un centro de interpretación.

Urgencia

La actuación es urgente. Así lo ratifican los especialistas, que advierten sobre el riesgo de ruina en el que se encuentra. La construcción sufre filtraciones y escorrentías de agua, ataques de xilófagos --insectos que se alimentan de la madera-- y hongos. También preocupan los problemas de estabilidad estructural, entre otras debilidades que pretenden subsanar con las obras.

Así las cosas, la intervención municipal y haber alcanzado un acuerdo de compra que se había resistido durante décadas, salvará esta torre datada en torno al siglo XII y que había sido convertida en una vivienda particular.

La solución a los problemas identificados ya ha sido diseñada y fue compartida con las personas que acudieron a la presentación. Por una parte se garantizará la estabilidad y conservación de los elementos constructivos. Mejorarán las condiciones de accesibilidad --ascensor o baño adaptado--, así como la visibilización del conjunto arquitectónico.

Un detalle del interior de la torre, que será sometida a una rehabilitación total. MÒNICA MIRA

Respeto a la estructura original

En la medida de lo posible, quieren conservar los materiales originales y «tener presentes todas las capas de la historia», como destacan desde la empresa que ha redactado el proyecto. Aseguran que «no se ejecutará ninguna intervención que no sea estrictamente necesaria», de manera que «no se perjudique a la conservación de los valores del edificio».

Entre otros criterios, se tendrá en cuenta «la difusión e interpretación del bien», fundamentándose en la filosofía de que para proteger el patrimonio hay que conocerlo. Y ese objetivo constituirá la esencia del uso de la torre una vez restaurada, pues en las diferentes salas que se crearán en su interior, se ofrecerá información sobre Camins de l’Aigua, los vestigios de estructuras defensivas y militares como el Castell d’Uixó y otras alquerías fortificadas, y la puesta en valor del patrimonio cultural y etnológico de la localidad.

La alcaldesa, Tania Baños, incidió en que, «durante muchos años se ha perdido patrimonio que era de los valleros y las valleras» y con este proyecto «cumplimos con el compromiso de cuidar nuestros bienes patrimoniales y acercarlos a las personas, porque su conocimiento es la mejor forma de asegurar su conservación».

Financiación

Una vez firmado el compromiso de compra, la alcaldesa agradeció «la predisposición de los propietarios para llegar a un acuerdo» y anunció que el Ayuntamiento ha solicitado una subvención de 500.000 euros del plan Conviure de la Generalitat para acometer la restauración.

La presentación de este proyecto estuvo decorada artísticamente con un sorprendente concierto protagonizado por la violinista local Núria Garcia Bonilla, que combinó su virtuosa interpretación de las obras musicales escogidas con una proyección audiovisual sobre la fachada de la iglesia de la Asunción, que el público agradeció con una estruendosa ovación.