El pleno del Ayuntamiento de Vinaròs aprobó por unanimidad la modificación de la ordenanza fiscal reguladora para la recogida de basura, para incluir una rebaja del impuesto en un 50% a partir del 1 de enero de 2022 y durante un periodo de cinco años. De este modo, una vivienda que ahora abona 34,20 euros pasará a pagar 17,10, mientras que los cafés y bares también notarán la reducción de la presión fiscal, al pasar de 120 a 60 euros por este concepto, según puntualizó la concejala de Hacienda, María Cano.
Para el Ayuntamiento, la implantación de esta medida supondrá una disminución de ingresos de 337.000 euros el próximo año.
Por parte del PP de Vinaròs, Juan Amat señaló que apoyaban la propuesta, pero matizó que los socialistas «han incumplido su promesa electoral de eliminar la tasa de basuras», comentó. El resto de los grupos de la oposición consideró acertada esta medida.
Placas solares
La aprobación de la modificación de la ordenanza fiscal para incluir la rebaja del IBI para los ciudadanos que instalen placas solares fue el punto más discutido durante la sesión, ya que la oposición entiende que es una medida «más cara a la galería» que efectiva. Cano indicó que se bonifica el 50% del IBI (hasta un máximo de 400 euros) para los propietarios de viviendas que apuesten por instalar placas fotovoltaicas y que la medida entra en vigor a partir del 1 de enero.
Sin embargo, el impacto que tendrá esta decisión en las arcas municipales será de tan solo 3.784 euros, según han previsto, ya que únicamente 25 viviendas podrían solicitar esta rebaja en la actualidad. Es por ello que la portavoz del PVI, María Dolores Miralles, apuntó que «se trata de una rebaja de escaparate», pero están «a favor de la rebaja de cualquier impuesto», mientras el portavoz del PP, Juan Amat, argumentó su abstención en que «no es una bajada» de tributos, «sino una tomadura de pelo, porque hay solo 25 inmuebles con placas solares y algunos no pueden optar a la bonificación porque son empresas», recordó.
Cano respondió que «el impuesto al sol que impuso el PP es el motivo de que no haya actualmente tantas en viviendas» y defendió que la medida «es un grano de arena» que aportan «para incentivar este tipo de instalaciones», concretó sobre la nueva decisión.
