Almassora inició ayer los prolegómenos de sus fiestas patronales en honor a la Mare de Déu del Roser. Y lo hizo con una visita de las autoridades a la residencia municipal de la tercera edad, que cumple 20 años de trayectoria, coincidiendo con el Día de las Personas Mayores. Una cita en la que no pudo faltar un nuevo homenaje a Balbina Jarque, que con sus 105 años es la vecina más longeva de la ciudad.
La alcaldesa, Merche Galí, lideró la representación municipal y entregó un ramo de flores a la centenaria, usuaria de una residencia que abrió sus puertas el 1 de octubre del 2001 y que ayer celebró dos décadas de trayectoria con una comida especial y brindis para internos y plantilla. La actividad regresó al lugar por la tarde, con la inauguración de la escultura Almassora Feliç, obra de Rafa Gallén, en el parque José Mingol anexo a la residencia de mayores.
Un monolito que representa la unión intergeneracional y la participación de todas las personas en el día a día de la ciudad. El proyecto Ciudad Feliz, que impulsa la Concejalía de Participación Ciudadana e integra, entre otras, a asociaciones juveniles, culturales y de mayores, ha permitido mejorar la imagen de espacios sin uso como la plaza ubicada junto al pabellón La Garrofera.
Más cultura
Por otra parte, la actividad cultural que da inicio a las fiestas del Roser incluyó la apertura de la exposición de pintura Almassora Pinta +, en el Espai Mercat, que está abierta a las visitas hasta el próximo 24 de octubre.
La jornada culminó con misa y besamanos simbólico a la Mare de Déu del Roser. Una cita previa a la misa principal en honor a la patrona de mañana domingo (19.00 horas), y la posterior procesión por las calles de la Vila.
El fin de semana continuará con actividades para mayores y jóvenes, el concierto de La Esmeralda o el tributo a El Canto del Loco en la plaza de España.
