Hasta última hora de ayer en la comisión de las fiestas patronales de la Sagrada Familia y el Santísimo Cristo de la Vall d’Uixó estuvieron estudiando las posibilidades de organización del empedrao popular, sobre todo teniendo en cuenta el nuevo marco normativo tras la flexibilización de las restricciones sanitarias.
Esta cena, que tendrá lugar este viernes por la noche a partir de las 21.30 horas, puede ser el acto más multitudinario de cuantos engrosan el programa, sin tener en cuenta el fin de semana taurino. Al desarrollarse al aire libre, en la plaza Sagrada Familia, desde el primer momento la comisión la había planificado sin limitación de aforo, aunque sí con una distribución muy precisa de las mesas, separadas entre sí y con un número máximo de comensales, como el que afecta a bares y restaurantes en la actualidad.
A pesar de que la última orden de la Generalitat ha flexibilizado algunas cuestiones como los aforos en los actos públicos al aire libre, los responsables de la organización quisieron valorar todas las posibilidades a su alcance antes de tomar la decisión definitiva.
¿Más plazas por mesa?
En un principio, llegó a plantearse la idea de ampliar el número de plazas por mesa, pero finalmente, tras la reunión de ayer, decidieron mantener la organización inicial. Así, los asistentes deberán distribuirse en mesas de como máximo 10 comensales. Como detalló ayer el presidente de la junta directiva, Juanma Sánchez Bonifás, «estableceremos una entrada por la calle Matilde Bel, donde habrá gente de la comisión que dispensará hidrogel a los asistentes y los acompañará a su lugar». Cuando todos los participantes estén sentados, serán también miembros de la comisión los que repartirán la cena.
A su vez, organizarán otra cola, «en la calle Unión, para la gente que prefiere recoger el empedrao para comérselo en casa».
