El Ayuntamiento de Almassora ha definido ya los retos hacia los que enfocará su pionero programa de compra pública innovadora, tres en total: potenciación del valor natural y como espacio de ocio del río Millars, recuperación y puesta en valor del suelo agrícola y revitalización de la Vila.

Este paso forma parte de las primeras fases de implementación del plan para incorporar la tecnología como motor de desarrollo económico y social. La Intervención municipal y la empresa Tech Friendly son las encargadas de pilotar este programa que cuenta con una subvención de 161.477,90 euros de la Agencia Valenciana de la Innovación, la mayor para un municipio de la provincia.

Proyectos al detalle

En el caso de la puesta en valor del río, el informe lo señala como “activo medioambiental y paisajístico de primer orden”. “Posee un alto valor ecológico y ambiental que, sin duda, debe ser preservado”, incide el informe. Esta parte propone incrementar sus usos potenciales a través de corredores verdes y conexiones que lo acerquen al propio municipio y a las localidades vecinas. Se trata de “rentabilizar” en el entorno con el objetivo de recuperar y promocionar la desembocadura y del paraje de Santa Quitèria.

Respecto al suelo agrícola, el estudio aborda el abandono de estas superficies de cultivo, que se agrava por la pérdida de masa arbórea, necesaria como pulmón verde del municipio y como sumidero de CO₂. El informe destaca que entre el núcleo urbano principal y la playa existe una zona de suelo no urbanizable de protección agrícola de 4,5 kilómetros de anchura cuyo estado de conservación es óptimo. Por ello, este reto apuesta por impulsar la recuperación del suelo productivo agrícola mediante la búsqueda de nuevas herramientas y mecanismos para evitar el abandono de la actividad, así como para ponerla en valor como activo vinculado a la historia y la tradición del municipio.

El tercero de los retos destacados en el informe es la mejora del casco antiguo, que presenta una serie de problemáticas a solventar: envejecimiento de la población, bajo índice comercial, degradación de las viviendas y dispersión en la dotación de espacios, infraestructuras y activos municipales. Este reto apuesta por profundizar en nuevas soluciones de obra y de programas, entre otros, para revitalizar la zona desde una perspectiva integral, como es el caso de la peatonalización ya iniciada con la cofinanciación de los fondos FEDER de la Unión Europea, entre otros proyectos.

En los tres casos, el consistorio perseguirá la demanda pública a través de la compra de productos o servicios que no existen en el mercado y que requieren de un proceso de codiseño entre la propia administración y la empresa privada. Por ello, el Ayuntamiento invitó a más de un centenar de firmas que operan en el término municipal para presentarles un programa inédito en la localidad.