Sorpresa en el Alt Maestrat con la repentina dimisión del alcalde de Catí, Pablo Roig. El hasta ahora primer edil del PP, totalmente afianzado al cargo en la localidad tras lograr una apabullante mayoría absoluta en las elecciones del 2019 --logró seis ediles, con cerca del 80% de los votos para los populares, y el PSPV se tuvo que conformar con uno--, escogió las redes sociales para trasladar la noticia a sus vecinos.
En este sentido, la tarde de este lunes ha publicado en su muro de Facebook un texto en el que daba cuenta de su decisión y señalaba también a su sucesor, Adrià Puig.
"Los relevos hay que hacerlos cuando uno es consciente de que hay personas con más fuerza y disponibilidad para seguir sumando por la causa, en este caso, Catí" comenzaba. Seguidamente, Roig enviaba un mensaje de agradecimiento a todos sus conciudadanos “por dejarme vivir la mejor experiencia de mi vida”. Este municiio del Alt Maestrat cuenta con 714 vecinos empadronados.
Finalmente, anunciaba que será Puig, actual edil del equipo de gobierno, quien, a partir de ahora será su sucesor al frente del consistorio. Roig no escatimó en halagos para valorar a su compañero del que afirmó que es “una persona formada, amante de su pueblo y con disposición para atender las necesidades de Catí”. Además destacó su solvencia de Puig por la experiencia adquirida durante “más de 12 años de contacto diario y siempre por el mismo tema: Catí”.
Cabe recordar que Pablo Roig ha sido alcalde de Catí por el Partido Popular desde el 2015 hasta la actualidad ininterrumpidamente, aunque entró en la corporación municipal en el 2011, con Manuel Puig como primer edil.
Además, durante las legislaturas 2011-2015 y 2015-2019 ostentó el cargo de diputado provincial en la Diputación de Castelló, bajo el mandato del presidente, Javier Moliner, quien confió en Roig en su primer mandato pese a su juventud.
Asimismo, el hasta ahora alcalde de Catí fue noticia a finales del 2020 al anunciar públicamente, también a través de las redes sociales, su homosexualidad.
Fue todo un gesto que fue reconocido y aplaudido por cientos de personas, tanto vecinos, compañeros de partido o políticos de otras siglas.
Entre las reacciones a la dimisión de Roig estuvo la de la presidenta de los populares en Castellón, Marta Barrachina, quien puso en valor la «dedicación y empeño» del joven alcalde, que deja su cargo tras «dedicarse con pasión a su pueblo y convertirlo en un modelo y ejemplo para el interior».
Asimismo, dio la bienvenida a Puig, «con la ilusión y la fuerza de seguir la incansable labor de quien ha sido maestro», y le trasladó el apoyo del PP provincial.
