Les Useres recupera la tradición de Els Pelegrins y, después de dos años de interrupción debido a la crisis sanitaria del covid-19, se prepara ya la edición del próximo mes de abril. Por tal motivo, el alcalde de la localidad, Jaime Martínez, y el depositario de tan ancestral tradición, Alfredo Royo, mantuvieron ayer jueves un encuentro con el vicario general, Javier Aparici, en el Palacio Episcopal de Castellón para conocer la evolución de las obras de rehabilitación del santuario de Sant Joan de Penyagolosa y cómo afectarán a la celebración de la peregrinación.

 “El objetivo es que exista una perfecta coordinación entre todas las partes para que Els Pelegrins de les Useres se desarrolle, dentro de las limitaciones que pueden imponer las obras, con total seguridad y con la mayor brillantez posible”, señala Martínez, quien anuncia que se ha pedido al Obispado información “sobre las dependencias que se podrán utilizar” y también se ha acordado elaborar una relación de los servicios que habrá que garantizar esas jornadas, “como es el caso de servicios higiénicos y, por supuesto, agua corriente”.

 Así pues buena noticia ya que se trata de una de las peregrinaciones más auténticas y admiradas que existen en España, acaparando Les Useres cada último viernes de abril el protagonismo de la Comunitat Valenciana. Rogativa ancestral por excelencia de la provincia de Castellón, declarada Bien de Interés Cultural y cuyo camino está reconocido como Monumento Natural por la Generalitat Valenciana.

Reunión de Jaime Martínez y Alfredo Royo con el vicario general, Javier Aparici. MEDITERRÁNEO

 Un legendario camino hacia Sant Joan de Penyagolosa, siendo cada vez mayor el número de público que les despide el viernes, y sobre todo el que les espera el sábado en les Useres, además de los muchos senderistas que les siguen caminando durante las dos jornadas, reflejándose el incremento de expectación que despierta el hecho cada año.

La peregrinación la forman el sacerdote, tres cantores, tres clavarios, el guía, doce peregrinos, el depositario, cocineros, ayudantes, un representante del Ayuntamiento, y 'les carregues' que son los mulos o caballos permitidos que hacen el transporte de todo lo necesario. Todos ellos sin olvidarnos de “les promeses” que son personas que aunque la mayoría no tengan vínculo familiar con Les Useres y por ello no pueden salir de peregrinos, les siguen en el mítico camino, así como cientos de personas senderistas de todas partes simpatizantes de esta ancestral ruta.

Nunca han faltado peregrinos para este reconocido acontecimiento, al contrario es cada vez mayor el número de gente que quiere salir como peregrino, y subrayando que tan solo se ha suspendido la peregrinación en tiempos de la guerra civil y los dos últimos años por el covid.