El Ayuntamiento de Benicarló adjudica los trabajos pendientes del proyecto de transformación en vía urbana de la antigua N-340 por 890.260 euros. Esta actuación servirá para convertir en bulevar el tramo de carretera comprendido entre el cuartel de la Guardia Civil y la calle Vinaròs. Tal y como anunciaron ayer desde el propio consistorio, una vez firmado el contrato deberán ejecutarse las obras en un plazo máximo de 4 meses. Dado que la previsión es que comiencen el próximo abril, estarán concluidas este verano. 

La constructora adjudicataria es Aglomerados Los Serranos SA, quien se encargará de la finalización de las reformas que dejó pendientes la anterior mercantil y llevan paralizados desde mediados del 2020, por lo que han tenido que volver a licitarse. En ese caso, las tareas se adjudicaron con una rebaja del 27% sobre el presupuesto de licitación y la empresa se negaba a asumir los imprevistos que surgieron. Una situación que comportó graves problemas de movilidad. 

Importante proyecto urbanístico

La alcaldesa, Xaro Miralles, presentó el plan del bulevar en octubre del 2018 y lo calificó como «uno de los proyectos urbanísticos más importantes para el futuro de Benicarló, porque convertirá la actual barrera en una vía urbana que dará prioridad a los peatones». A día de hoy, el tramo de dos kilómetros cuenta con cuatro rotondas ubicadas a la altura de la avenida de Febrer Soriano, la calle de Ulldecona, la avenida del Maestrat y la calle del Puig de la Nau. «Esperamos que las obras finalicen en el período previsto de cuatro meses y que, de una vez por todas, acaben las molestias que se han ocasionado a los vecinos y usuarios durante tanto tiempo», como manifestó la primera edila. 

Obstáculos

Las intervenciones comenzaron a principios del 2020 pero, por «problemas de incumplimiento» con la firma adjudicataria, «los trabajos se paralizaron y se tuvo que resolver el contrato, un procedimiento nada fácil que requiere una compleja tramitación administrativa y unos plazos que han provocado la ralentización del proceso», dijo Miralles. 

Cabe recordar que el Consell Jurídic Consultiu de la Comunitat emitió en julio del 2021 un dictamen favorable al Ayuntamiento para resolver el contrato, «por incumplimiento culpable». «Los problemas con la empresa empezaron al arrancar las obras y nos han llevado por un calvario que llega al final. Ahora pondremos fin a esta pesadilla de una vez por todas», apuntó entonces la alcaldesa. 

En este sentido, la munícipe recriminó ayer a la anterior mercantil encargada de la ejecución el hecho de «ocasionar importantes perjuicios, tanto al consistorio, como a los múltiples vecinos que deben circular por este tramo cada día». Una situación que ahora se solventará con la culminación de los trabajos del bulevar. 

Rotonda Benicarló-Peñíscola

Otra actuación clave en materia de seguridad para Benicarló también se ejecutará este año. Se trata de la rotonda de la antigua N-340 entre Peñíscola y Benicarló, en el cruce con el camino de la Ratlla del Terme, con un presupuesto de 400.000 euros. Esa es la previsión que manejan las partes implicadas en el proyecto, que asumirá íntegramente la Generalitat tras las reivindicaciones de los alcaldes de regular el tráfico en esa zona y mejorar la seguridad vial en uno de los tramos más concurridos para acceder a la parte sur de Benicarló y la norte de Peñíscola.