El Ayuntamiento de Burriana ha comenzado en abril el refuerzo de los trabajos para evitar la proliferación de mosquitos tras las fuertes lluvias del pasado mes de marzo, con el objetivo de evitar una eclosión masiva en los días de Pascua. El previsible aumento de las temperaturas en las próximas jornadas y la acumulación de agua son el caldo de cultivo perfecto para la reproducción de los dípteros, por lo que la empresa Lokímica, responsable del control de plagas, ha efectuado diversos tratamientos en los puntos más sensibles del municipio, tanto en el casco urbano como en la zona marítima.

La concejala de Salud, Lolín Carbonell, confirmó que, de momento, no tienen constancia de ningún foco de alerta que precise intervención inmediata, no obstante, entre hoy y el domingo «se volverán a revisar los puntos de monitorización por si se detecta algún problema y la empresa mantendrá equipos de guardia para intensificar los tratamientos».

Estas actuaciones se complementan con los tratamientos que realiza la Diputación de Castellón, centradas en las zonas agrícolas, de marjal y fluviales en el término. Además, el Ayuntamiento está a la espera de recibir la autorización para efectuar los tratamientos aéreos aprobados por la Conselleria de Sanitat.