La comunidad escolar del IES Gilabert de Centelles de Nules lleva todo un curso esperando a que la Conselleria de Educación licite el servicio de cantina que se suprimió cuando finalizó el anterior contrato, hace casi un año. Esa espera se está haciendo tan larga, que la AMPA decidió ayer visibilizar una reivindicación que hasta ahora había sido discreta, con la presentación de varios escritos ante la dirección territorial que, según dicen, no han tenido respuesta. Lo hicieron invitando a almorzar a alumnos y profesores.
La secretaria de la AMPA, Ana Lozano, explicó que la cantina servía a diario una media de 30 a 40 menús caseros --preparados en las instalaciones-- para comer, que llegaban a 60 «en época de evaluaciones» y cada día «daban hasta 200 almuerzos». Inciden en que no eran pocas las familias con problemas de conciliación que confiaban en que sus hijos menores comían en la cantina, porque podían hacerlo «de manera saludable y a un precio muy económico».
El centro tiene casi 1.500 alumnos y algo más de 190 profesores.
