Facsa renueva un nuevo tramo de la red de distribución de agua potable en Betxí. Las tareas se centran en el lado par de la arteria principal de la localidad, la avenida Primero de Mayo, desde la calle Plaza Mayor, hasta la calle Constitución, donde la compañía reemplazará más de medio kilómetro de la actual red de fibrocemento y PVC, con diámetros que oscilan entre los 75 milímetros (mm) y los 80 por una conducción nueva de polietileno y 110 mm de diámetro.

Asimismo, desde la compañía informaron ayer que también instalarán 19 nuevas válvulas de seccionamiento de la red, así como dos hidrantes, cinco bocas de riego y 36 acometidas domiciliarias de mayor diámetro --pasarán de los 25 mm actuales a uno de 32 mm-- para adecuarlas a los usos actuales del agua potable, lo que supondrá, en muchos casos, una mejora en la presión del suministro para los usuarios de esta calle.

Esta nueva actuación de optimización de la conducción, unida a mejoras anteriores ya ejecutadas y otras que hay en estudio, pretenden lograr un mayor control de todos los procesos que intervienen en el servicio de abastecimiento de agua y que aportan una mejora en la calidad y el control sanitario del agua distribuida.

No en vano, antes ya habían implementado mejoras tecnológicas, como las telecomunicaciones aplicadas a los datos de control de caudales y calidad del agua por zonas o sectores, y en las instalaciones de bombeo, almacenamiento y potabilización, que permiten un control en tiempo real del estado de funcionamiento. Asimismo, contribuyen a un mantenimiento más eficaz y predictivo y un menor número de averías y fugas.

Más espacios peatonales

La ejecución de estos trabajos en la red de agua forman parte de las obras que realiza el Ayuntamiento para transformar su avenida central, que supondrán la construcción de más espacios peatonales, la instalación de un carril bici y la plantación de más árboles y vegetación.

La primera fase de las tareas, presupuestadas en 450.000 euros, deberán estar terminadas en agosto y, como ya reivindicó el alcalde, Alfred Remolar, es el proyecto estrella de la legislatura y uno de los más importantes de la última década para el desarrollo de Betxí.