Los masoveros del Maset de Boix, en Morella, han denunciado esta semana un ataque de buitres sobre ganado vivo que acabó con la muerte de un ternero recién nacido. Según advierten los afectados --protagonistas del parto múltiple de una oveja hace unos días--, estos episodios se repiten todos los años cuando llega la temporada de partos, que coincide con esta época de la primavera. 

Al respecto, la propietaria del animal, Ana Belén Soro, quien ha relatado los hechos en el vídeo que acompaña a esta noticia, clama que «es una vergüenza. Tenemos al ganado estabulado y vigilado, pero te despistas un momento y los buitres se tiran sobre las vacas recién paridas, es una barbaridad».

"Van a por la cría cuando aún yace en el suelo y la pican en las partes blancas, primero les rompen los ojos y después los abren por la zona del ano"

Explica que las aves carroñeras actúan siempre igual: «Van a por la cría cuando aún yace en el suelo y la pican en las partes blancas, primero les rompen los ojos y después los abren por la zona del ano». La indignación es total para esta joven que lamenta «falta de medios» ante una realidad que se repite todos los años.

«Ni somos los primeros ni seremos los últimos. Es una lotería y siempre nos toca pagar a los masoveros», sentencia. También critica la «inacción» y las políticas de la Conselleria de Agricultura. «Si quieren a los buitres que los mantengan ellos, no tenemos que poner la comida los ganaderos a costa de nuestros animales», insiste. 

Piden un cambio de protocolo

"Si quieren a los buitres que los mantengan ellos, no tenemos que poner la comida los ganaderos a costa de nuestros animales"

Cabe recordar que, como informó este periódico, el sector primario reivindica desde hace lustros un cambio en el protocolo de actuación en caso de ataque de este tipo de depredadores. En caso de ataque de buitres, según recoge la actual normativa que gestionan desde el Consell, el ganadeo tiene que seguir una serie de pasos que califican de «burocracia interminable». «Desde que notificas el ataque hasta que puedas cobrar pasan años», lamentan.

Por otra parte, también denuncian las trabas que se encuentran para poder certificar la muerte por ataque. «Tienes que hacer mil papeles, y además ante el mínimo resquicio de duda se desentienden del problema y no lo certifican», explican ganaderos afectados de Els Ports. Por otra parte, critican el funcionamiento de los muladares y la falta de comida para las aves, que según indican es el problema de fondo. «Si tuvieran comidas suficiente no se tirarían sobre los animales vivos, o les falta comida o sobran buitres, que escojan en Conselleria, pero que actúen de una vez», señalan.