El 7 de junio está previsto constituir la comisión mixta a través de la cual se planteará, negociará y concretará el proceso de transferencia de la gestión de la residencia de mayores Hogar Sagrada Familia de la Vall d’Uixó del Ayuntamiento a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.
El equipo de gobierno ya puso sobre la mesa la necesidad de estudiar ese traspaso de competencias la legislatura pasada, aunque no fue hasta principios de la actual, en concreto en diciembre del año 2020, cuando la consellera y vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, visitó el municipio y anunció que en la agenda de su departamento estaba cumplir con la ley valenciana a este respecto, en la que se estipula que este tipo de servicios públicos deben estar gestionados por la administración autonómica antes del 2023.
La voluntad de iniciar el proceso de negociación se volvió institucional en marzo del 2022, cuando el pleno aprobó por unanimidad el inicio de los trámites de transferencia, paso burocrático indispensable.
La alcaldesa de la Vall, Tania Baños, desde que se planteó la necesidad de abordar el traspaso de la gestión del Hogar siempre ha defendido que hasta que llegue ese momento «no vamos a escatimar en recursos para que los usuarios reciben la atención que necesitan y merecen», y también ha asegurado que esa trasferencia de competencias no se va a realizar a ciegas, pues el Ayuntamiento quiere participar en una negociación que debe concretar cuestiones como qué pasa con el personal que actualmente trabaja en la residencia contratado por el consistorio, o cómo se va a tramitar el uso autonómico del edificio, porque su titularidad de es pública, pertenece a la Caixa Rural la Vall San Isidro, que la cedió al municipio en su día para hacer el Hogar. Baños asegura que defenderá los intereses del municipio.
Tres meses después, la Conselleria da el primer paso convocando la constitución de la comisión de trabajo, en la que estarán presentes técnicos y representantes políticos, tanto municipales como de la Generalitat. El propósito es que, a la mayor brevedad posible, Igualdad y Políticas Inclusivas se hago cargo de la residencia de mayores, lo que supondrá que el Ayuntamiento dejará de destinar a este objetivo más de un millón de euros de su presupuesto.
La alcaldesa, Tania Baños, celebra este avance porque supone atender una demanda justa y resuelve un agravio comparativo, pues los ayuntamientos de la Vall y Benicarló son los únicos de la provincia que gestionan sus residencias, con lo que supone de sobrecarga financiera para las cuentas municipales cada año.
