Después de que el Ayuntamiento de Peñíscola aprobara en el pleno del pasado jueves una moción para exigir a la Conselleria de Sanitat, entre otras reivindicaciones, la reapertura de sus dos consultorios para reforzar la atención en verano, fuentes del departamento autonómico que ahora dirige Miguel Mínguez explican que realizarán una inspección con el objetivo de conocer el estado de ambos recintos, tanto el de Sorolla como el de Peñismar.
Los dos centros, situados en la playa, permanecen cerrados desde marzo de 2020, hace más de dos años, con motivo de la pandemia.
Desde Sanitat especifican a Mediterráneo que el departamento de Salud de Vinaròs, área sanitaria a la que pertenece Peñíscola, «ha solicitado al servicio de prevención de riesgos laborales que evalúe las instalaciones de los dos consultorios para determinar si reúnen las condiciones para garantizar una atención segura».
Un mensaje algo más esperanzador para los intereses del Ayuntamiento que el que recibió como respuesta del propio departamento de Vinaròs, que, como contó este periódico, «no veía necesaria su reapertura» para que así el servicio esté todo centralizado, según denunciaron desde el consistorio.
Refuerzo del centro de salud
Ante el aumento exponencial de habitantes que registra Peñíscola en temporada alta, pasando de 8.400 empadronados a prácticamente 120.000 personas, otra de las exigencias del equipo de gobierno es contar con más médicos extra durante estos meses. Aunque desde Sanitat explican que aún no está definido el plan de vacaciones y refuerzos de verano (suelen aprobarlo entre mitad y finales de junio), fuentes de la Conselleria adelantan que «la planificación de la asistencia sanitaria para la época estival contempla el refuerzo en turnos de mañana y tarde en el propio centro de salud de la localidad».
A la que Sanitat sí cierra ya la puerta es a la petición del Ayuntamiento de contar con una base de ambulancias, ya que, aluden, no es una gestión que va por deseos municipales, sino que es un reparto que realiza cada departamento por áreas y zonas. «Tener una base de ambulancias no garantiza una asistencia sanitaria más rápida, llegarían al mismo tiempo que lo hacen ahora», argumentan.
