Un nuevo toro de gran espectacularidad, guapo como él solo, se suma a la lista de astados que Satine ha adquirido para esta temporada. Si hace unas semanas presentó un toro de Miura que ya ha levantado una tremenda expectación, ahora es el turno de este torazo de Partido de Resina, cuya seriedad y trapío hace honor a ese gusto de Satine por una presentación impecable solo al alcance de las grandes plazas como Madrid, Pamplona o Bilbao. Porque bien se podría haber lidiado en alguno de estos cosos de primera categoría, pero no, Satine ha querido que su destino sea los festejos populares de bous al carrer.
Si en 2019 Satine logró hacer historia con Nubarrón, uno de los toros más mediáticos que se recuerdan y que puso a Burriana en el centro del foco informativo, esta vez no quiere ser menos con este toro del mismo hierro, Partido de Resina, divisa que goza desde hace décadas del reconocimiento y la admiración de la afición de esta tierra. Se trata de una popularidad que Satine quiere aprovechar para dar a conocer un festejo de gran arraigo en Burriana: el bou en corda de Santa Bárbara, una tradición que lleva celebrándose en esta pedanía desde hace más de 130 años y que la convierte en única dentro de la provincia de Castellón, siendo un referente para otras localidades que también se decantan por esta modalidad.
Por ese motivo, aunque en un principio su destino era las fiestas de la Misericordia, finalmente será ensogado para recorrer los caminos de esta pedanía, entre naranjos, huertas, acequias y alquerías, casi en semilibertad, controlado únicamente por los sogueros, que intentan conducirlo de la mejor manera posible. De hecho, hay un objetivo claro en esta hecho: el apoyo, difusión y el reconocimiento tradicional del bou en corda de Santa Bárbara.
Pablo Romero
Los ahora conocidos como Partido de Resina es la antigua ganadería de Pablo Romero, con un encaste propio que le da una singularidad única y una belleza particular. De hecho, a los toros de esta divisa los califica la afición como los más guapos del campo bravo. El toro adquirido por Satine hace honor a esa seriedad de los pablorromeros. Un toro con muchos pechos y enorme volumen corporal, con la grupa muy desarrollada y un morrillo prominente, de típico pelaje cárdeno. Y eso sí, dos espabiladeras por pitones, de gran longitud y astifinas, que le dan ese aspecto imponente y terrorífico. Como es costumbre en Satine, el toro vive a cuerpo de rey en la finca sevillana de Aznalcázar. Todo con los máximos cuidados para que el toro llegue en las mejores condiciones.
La movilidad de estos toros, incluso la embestida poco humillada y con la cara alta, puede convertirse en virtudes para disfrutar de un buen espectáculo en esta emblemática pedanía y poder deleitarse con unas imágenes sin igual de un animal en plena naturaleza. No cabe duda que ver correr un astado de tal categoría entre huertos y naranjos es un espectáculo único. La gran cita es en la pedanía burrianense de Santa Bárbara. Un acontecimiento cuya espera ya se hace larga.
