Un documental plasmará por primera vez de principio a fin la travesía polar SOS Arctic a bordo del Trineo de Viento, que acaba de completar su 11ª edición tras cruzar de oeste a este Groenlandia y en la que se ha estrenado un castellonense, el alpinista de Borriol Carlos Pitarch. Precisamente Pitarch ha sido el encargado de grabar “en condiciones extremas” y con temperaturas de hasta 30 grados bajo cero toda la expedición, liderada por el experimentado polarista Ramón Larramendi.

Fue éste quien fichó para el equipo de SOS Arctic 2022 al borriolense, que atesora ascensos a las grandes cordilleras de todo el mundo (Alpes, Pamir, Andes, Atlas, Himalaya) y varios ochomiles (Cho-Oyu, Everest). Esa pasión por la montaña es la que provocó un afortunado cruce de caminos entre Pitarch y Larramendi y que le ha llevado a ser parte de la tripulación del Trineo de Viento. Tras varios encuentros diseminados en el tiempo, volvieron a coincidir el año pasado durante una travesía en Islandia.

“Estuvimos hablando mucho, le enseñé uno de los documentales que había hecho aquí, le gustó y un día me propuso participar en esta expedición”, comentaba Pitarch horas antes del inicio de SOS Arctic 2022. Así, durante un mes, su labor, además de la de ser uno de los tres tripulantes de este trineo tirado únicamente por cometas, ha sido la de documentar gráficamente toda la travesía para reforzar esa llamada de alerta ambiental que da sentido a la expedición. “Los polos son el aire acondicionado del planeta y su deshielo lo altera todo”, indica.

Carlos Pitarch documentando gráficamente el viaje en Groenlandia. Juan Manuel Sotillos

Colaboración de la Diputación

El documental grabado por el montañero verá la luz, presumiblemente, a finales del próximo mes de noviembre. “El objetivo ha sido grabar el día a día de toda la expedición. No hay una película de principio a fin del Trineo de Viento, y creo que saldrá un documental interesante”, explica. El film, que se llamará como la expedición: SOS Arctic 2022, tendrá también un fin divulgativo a través de un proyecto respaldado por la Diputación de Castellón. “El reto es divulgarlo y compartirlo por diferentes puntos de la provincia y concienciar a la ciudadanía sobre el impacto del deshielo de los polos. Se busca sensibilizar y lanzar un mensaje, que hay que cuidar el medio ambiente para protegernos, y desde lo local, podemos actuar”, detalla el de Borriol.

Vientos de 120 km/h

"El reto es divulgarlo y compartirlo por diferentes puntos de la provincia y concienciar a la ciudadanía sobre el impacto del deshielo de los polos. Los polos son el aire acondicionado del planeta y su deshielo lo altera todo"

Pitarch reconoce que grabar en un clima tan extremo y sobre un territorio tan hostil no ha sido tarea fácil. “Hace falta destreza técnica y física. Hemos vivido varias tormentas, con vientos de 120 kilómetros por hora que te golpean y desestabilizan. Y luego están las temperaturas… La grabación ha de hacerse con guantes, por ejemplo. Imposible quitártelos, y eso añade complejidad. Hay que reaccionar muy rápido”, indica. En estas condiciones meteorológicas “los problemas técnicos están siempre al hilo de lo imposible, en constante acecho. El riesgo de que los equipos dejen de funcionar es alto y por eso disponíamos de varios soportes, para tener alternativas”. Aunque las cámaras utilizadas son especializadas, “hemos tenido que lidiar con esas tormentas en las que la nieve es como la arena en el desierto, se cuela por todas partes. Ha sido complicado, pero el documental será una realidad”, señala.

Los miembros de la expedición, con el nuevo 'nunataq' al fondo. Juan Manuel Sotillos

60 días de periplo

Tras 60 días de periplo: la mitad para preparar la travesía y armar el trineo (que ha soportado más de 2.000 kilos de peso sobre su estructura de madera y cuerdas) y la otra mitad navegando por este desierto blanco, Carlos Pitarch reconoce, ya en ‘casa’, que la experiencia le ha marcado. “Ha sido brutal. Un mes mirando al horizonte hasta el infinito”, dice.

"El cambio climático es real y es especialmente visible en la costa, con glaciares en claro retroceso. El hielo ocupaba el 90% de Groenlandia y ahora roza el 80%. Los polos son parte fundamental en la vida del planeta"

Precisamente uno de los hitos de la expedición ha sido el hallazgo de un nunatak (isla rocosa rodeada de hielo, en inuit) no catalogado. Una maravilla natural que, sin embargo, tiene mensaje: “Impacta el descubrimiento, pero esa montaña está ahí porque ha surgido por el deshielo de la zona alta de Groenlandia. Refleja que el cambio climático es real, y tal y como indica Larramendi, es especialmente visible en la costa, con glaciares en claro retroceso. El hielo ocupaba el 90% de Groenlandia y ahora roza el 80%. Los polos son parte fundamental en la vida del planeta”.

Analizar el impacto del cambio climático ha sido el motor de la travesía, que ha sumado a su equipo a las investigadoras Lucía Hortal y Begoña Hernández, encargadas de recoger durante los mil kilómetros recorridos muestras de hielo a diferentes niveles y micropartículas para los proyectos científicos que se desarrollarán con la Universidad Autónoma de Madrid y el Centro de Astrobiología de Madrid.

El montañero y periodista Juan Manuel Sotillos y el también alpinista Marcus Tobía han completado el equipo de SOS Arctic 2022. La Antártida será el destino de la 12ª expedición del Trineo de Viento. “Ojalá tenga la oportunidad de ir; me sumaría sin ninguna duda”, concluye Carlos Pitarch.