Los ciclistas tienen prohibida la circulación por la autovía CV-18 entre Castelló y Nules. Una reciente decisión de la Conselleria de Movilidad que ha generado indignación entre quienes practican esta modalidad deportiva, tanto competitiva como de aficionados. Ni la entienden, ni la comparten. Y coinciden en que los responsables políticos que han abordado esta medida no son conscientes de las alternativas y de su peligrosidad.
Que la prohibición es un «sinsentido» y no tiene en cuenta la realidad de las infraestructuras lo defiende con vehemencia Rubén Capdevila, campeón de ciclismo adaptado de Castellón. Habituado a usar el vial por el que ahora le impiden circular con su tándem, asegura que el carril bici que transcurre paralelo «no es, ni de lejos, alternativa», subraya.
Explica que «solo hay que tener en cuenta tres detalles». «Está lleno de gente paseando, con niños y animales o patinetes; no está permitido circular a más de 20 km/h, cuando en un entrenamiento podemos llegar a alcanzar los 60 en llano, y porque no está en condiciones», concreta. Algunos tramos transcurren sobre aceras, con farolas en pleno carril, trapas de alcantarillado, grietas, desperfectos y otros obstáculos incompatibles con la práctica deportiva.
Descartan ir en grupo
No se plantean siquiera la posibilidad de salir en grupo y circular por esa supuesta vía reservada para las bicicletas. «Grupetas de más de 10 personas ya son grandes, pero las hay de 30 o 60, que no pueden ir por un carril bici, y mucho menos por el de la CV-18», comenta.
Su malestar lo comparten muchos ciclistas y clubs deportivos de la zona. Para Toni Moral, de la directiva del Club Ciclista de Almassora, esta restricción «es un despropósito», que no considera la seguridad sobre la bicicleta.
"Han creado un problemón"
«Ese carril puede estar bien si vas de paseo, pero no para entrenar ni hacer deporte en bicicleta», recalca Moral, quien también incide en el hecho de que no esté permitido rodar a más de 20 km/h. «Nos obligan a salir por la nacional 340, que es mucho más peligrosa, y ojalá me equivoque, pero a la larga se va a demostrar en el número de accidentes», advierte. La CV-18 tiene dos carriles por sentido y un buen arcén que facilita la convivencia de coches y ciclistas. No pasa igual en la nacional.
Al presidente del Club Ciclista de Nules, Agustín Vaquero, le sorprende la noticia y reafirma los argumentos en contra de sus compañeros. «Prohibir es fácil», argumenta, «porque educar a las personas requiere de más compromiso». En su opinión, «lo que han hecho es crear un problemón».
«Parece que le molestamos a todo el mundo y solo hacemos deporte»
«Parece que le molestamos a todo el mundo, cuando lo único que hacemos es practicar deporte y compartir espacios públicos que son de todos, no solo de los coches», destacan los ciclistas. «Hay conductores a los que les molestamos nosotros, pero también un camión que adelante a otro en una autovía», remarca Toni Moral, quien considera que es un problema de educación y de respeto que con esta medida no solucionan.
A quienes han prohibido circular por la CV-18 y les dan como alternativa el carril paralelo, les invitan a subirse a una bicicleta y recorrerlo entre Nules y Castelló para comprobar que «para dar opciones, deben ser serias».