Un fallo lo tiene cualquiera o errar es de humanos. Esos podrían ser los titulares del inicio de la tercera jornada taurina de les Penyes en Festes de la Vall d'Uixó, porque quienes estaban esperando a las 8.00 horas para participar en el encierro de Miguel Parejo (Cabanes) de hoy se han quedado, como se suele decir coloquialmente, compuestos y sin novia. El ganadero no se ha presentado, porque a él le constaba que era a las 12.00.

Todos tenían constancia de que la cita de hoy era a las ocho, dispostivo policial y sanitario, Conselleria, aficionados, vecinos... todos menos el ganadero, que asegura que «si hubo un cambio en el horario, nadie nos ha informado, nosotros lo teníamos contratado para las doce». Y es que, desde hace años, en la programación de les Penyes se incluyen varios encierros a las 12.00 horas —los menos—, para aliviar la carga de actividades de los peñistas evitándoles un par de madrugones y propiciar así el descanso, además de sumar la participación de más público, pero ese no era el caso de hoy, como queda constancia en el cartel con la programación taurina que dieron a conocer hace un mes en un acto público.

A la izquierda el cartel que le remitieron a Miguel Parejo con los horarios taurinos, a la derecha el cartel oficial que anunciaron les Penyes.

Un error que será recordado como una anecdóta más, inédita en estas fiestas, pero que quienes esperaban la celebración del encierro en su recorrido y la prueba del ganado programada a continuación en la plaça del Mercat no se lo han tomado nada bien. Ha habido bronca en el coso taurino —aunque todavía no había llegado el grueso del público— y enfado entre los aficionados.

Rápida reorganización

La directiva no ha tenido más remedio que informar y reaccionar rápido: el encierro y la prueba se han aplazado hasta las 12.00 horas. No afecta al resto de programación de la jornada porque no hay más actos hasta la tarde, pero sin duda sí que tiene una afección en la organización que requiere este evento que recorre una parte del centro de la ciudad y, en consecuencia, obliga a volver a cortar calles, cuando no estaba previsto. También supondrá un cambio de planes para los comercios por los que transcurre la carrera, que tendrán que cerrar cuando no lo esperaban y un día más de lo que incialmente se había programado. Ni que decir tiene que a su vez supone un trastorno para los planes de los servicios sanitarios que, obligatoriamente, deben estar en todos los actos taurinos, y que tienen unos horarios contratados con mucha antelación, o los turnos policiales.

El presidente de les Penyes, Vicent Pitarch, asegura que como «quienes formamos el dispositivo del encierro nos reunimos una hora antes para prepararnos, la reorganización ha sido ágil» y todos han mostrado su predisposición para colaborar y poner las cosas fáciles.

El disgusto, sin duda, se lo ha llevado la ganadería, con más de 40 años de experiencia en el sector, y que asegura que nunca se había visto en una situación así. Ellos también lo tenían todo preparado, pero para estar en la Vall como mínimo una hora antes, como tiene costumbre, pero antes del mediodía.

En definitiva, un fallo si consecuencias graves, pero que ha alterado el normal desarrollo de las fiestas y de la vida cotidiana de este primer miércoles de agosto en la Vall d'Uixó.