La renovación de la avenida Castelló de Almassora ha comenzado con los trabajos previos de señalización de los accesos al perímetro y las zonas de paso. La empresa Ravi Obras Transportes y Excavaciones SL tiene seis meses para finalizar la obra que solucionará inundaciones, acondicionará el tráfico y mejorará la accesibilidad. La reforma tiene un presupuesto de 619.762 euros y está cofinanciada por los fondos FEDER de la Unión Europea al 50%.

La alcaldesa, Merche Galí, ha visitado esta mañana la zona para conocer el alcance de una intervención que en estos momentos afecta al tramo entre las calles Arboleda y Estatut d'Autonomia y que supone la desviación del tráfico en el carril de entrada a Almassora. La munícipe se ha disculpado ante el vecindario por el ruido y suciedad que sufrirán durante los próximos meses a consecuencia de unas obras “reivindicadas desde hace años para solucionar las inundaciones y facilitar la accesibilidad”.

Objetivo prioritario

Una vez que los operarios integren el sistema de recogida de aguas pluviales y otros servicios urbanos, la ejecución continuará hasta casi el final de la vía. De hecho, el objetivo prioritario de la actuación de mejora de la avenida Castelló pasa por solucionar los problemas de inundaciones. La empresa adjudicataria implantará un depósito soterrado en el aparcamiento que recogerá la escorrentía superficial y la filtrará parcialmente al subsuelo. El consistorio atenderá así las solicitudes recogidas en el Dia del Veí y lo hará a través de un sistema de drenaje sostenible.

Por otra parte, la obra incorporará la renovación de la red de residuales y de abastecimiento y una mejora del alumbrado público. Además, la iniciativa ampliará las zonas de tránsito peatonal al ensanchar la acera y dejar un único sentido de circulación con un carril. En este sentido, el aparcamiento combinará estacionamiento en batería y en cordón en función de las características de cada tramo de la calle. La reestructuración de la circulación hará que los operarios realicen una nueva distribución de la señalización que se adapte a las nuevas condiciones.

Reordenación de la calzada

La intervención también reordenará la calzada con una mejora del paso a peatones, carros de bebé y de la compra y sillas de ruedas y la incorporación de más zonas verdes, así como la implantación de un carril bici con un ancho de dos metros para facilitar la conexión en los accesos y salidas de Almassora. El proyecto eliminará las barreras arquitectónicas y apostará por la eficiencia en el consumo de agua. Por ello, la obra incluirá un sistema de riego automatizado para controlar el agua y reciclará las luminarias de las farolas existentes para disminuir la emisión de carbono.