Con la adjudicación de las obras de construcción del puente industrial que unirá los polígonos Belcaire y Mezquita --firmada el 25 de agosto, como ya publicó este periódico--, el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó ha salvado el último obstáculo que frenaba el crecimiento empresarial de la ciudad porque, como explicó ayer la alcaldesa, Tania Baños, la construcción de esta infraestructura de conexión era la única condición impuesta por el Ministerio de Transportes para autorizar la ampliación del polígono Belcaire C, sobre cuya tramitación el consistorio va a empezar a trabajar, y que supondrá la creación de un millón de metros cuadrados de suelo disponible.

Baños incidió en que este proyecto de reactivación industrial no será inmediato, «la tramitación en cuestión de desarrollo urbanístico es muy costosa», pero con el significativo avance que supone, a su parecer, el inicio de los trabajos de construcción del puente --que será inminente--, el municipio tiene ya luz verde para poner en marcha la planificación.

Por el momento, la gestión inmediata es formalizar la contratación de la conexión entre las dos áreas industriales, que se producirá en los próximos días, pues la empresa adjudicataria (Becsa) tenía cinco días --a partir de recibir la notificación de su selección-- para presentar documentación requerida por Urbanismo. A partir de ese momento, firmarán el contrató y podrá empezar a operar.

Periodificación de la inversión

Baños señaló que, en virtud del acuerdo alcanzado en su día con la Conselleria de Obras Públicas y Vertebración del Territorio, durante el 2022 se ejecutarán trabajos por valor de 400.000 euros, y el resto del presupuesto, un millón de euros más, será de aplicación durante el año 2023.

La munícipe remarcó que este avance en el desarrollo del proyecto ha sido posible porque el equipo de gobierno tomó «la decisión correcta» tras completarse la primera licitación sin que se presentara ninguna empresa, como consecuencia del incremento de los precios de las materias primas por la crisis de la invasión de Ucrania y la elevada inflación. El abordaje de una licitación actualizada para no retrasar más este trámite, ha permitido que, dos meses después de lo previsto, ya se tengan las garantías de que las obras del puente van a empezar, con toda probabilidad, a lo largo de septiembre.

En dos fases

La intervención se desarrollará en dos fases que tendrán continuidad. En la primera, se construirá la infraestructura de conexión. En la segunda, con cargo a la subvención del Ivace del 2023 y fondos municipales, se completarán los accesos y las vías peatonales.