Vall d’Alba dedicó la jornada de ayer de sus fiestas patronales a la Inmaculada Concepción, con una misa solemne, amenizada por la coral Arte Baturro; y una vistosa ofrenda floral a la imagen de la patrona que, posteriormente, fue sacada en procesión por las principales calles. Un intenso y emocionante programa religioso, en el que se contó con la colaboración de la Asociación de Mujeres de Vall d’Alba, que permitió a los vecinos, una vez más, mostrar su devoción por la patrona de la localidad.
Una jornada en la que los niños y los jóvenes volvieron a tener un especial protagonismo. Las peñas celebraron la tradicional comida de hermandad que, como ocurre cada año, reunió a un gran número de muchachos y muchachas del pueblo para, en un ambiente distendido, preparar las paellas o las parrilladas de carne en los alrededores del pabellón multiusos. Y, una vez finalizada la comida, los participantes realizaron un recorrido por las peñas del pueblo para celebrar una degustación de chupitos. Eso sí, acompañados por una festiva charanga, y mientras pedían a los vecinos que les tirasen agua para refrescarse.
Entradas con personalidad
Hoy se iniciarán los populares y multitudinarios encierros valldalbenses que, a buen seguro, atraerán a numerosos aficionados de la provincia, como ha ocurrido en todas las anteriores ediciones. En esta ocasión serán reses de la ganadería de Germán Vidal. Tampoco faltará mañana la no menos tradicional noche de disfraces.
Y es que los vecinos se encuentran inmersos en unas celebraciones, que finalizan el domingo, y cuentan con un extenso e intenso programa que va desde los reconocidos y emocionantes encierros de astados, hasta los mejores espectáculos musicales y verbenas, cenas multitudinarias, fiestas de disfraces y un sinfín de propuestas pensadas para todas las edades, desde los más pequeños hasta los más mayores.
