Burriana ha celebrado este jueves el día grande de la Mare de Déu de la Misericòrdia. Una jornada donde la solemnidad y devoción han sido las absolutas protagonistas para honrar con los actos religiosos a la patrona de la ciudad. Los actos centrales han sido la misa mayor en la basílica de El Salvador y, seguidamente, la multitudinaria procesión en la que han participado las comisiones falleras, peñas y, por supuesto, cientos de vecinos.
Por la mañana las campanas avisaban del comienzo de la primera eucaristía del día y, al finalizar, la pirotecnia Martí disparó fuegos artificiales con motivo de tan solemne jornada. Pero el acto más participativo fue la misa vespertina y la procesión que partió del templo, recorrió las calles Mayor, Purísima, Sant Xotxim, Sant Vicent, El Pla y las calles Barranquet, Pla de Sant Blai para, de nuevo regresar a la basílica y entonar los cantos y gozos a la virgen, ya en el interior de la iglesia.
Las reinas falleras, Sandra Candau y Ana Giménez, el presidente de la Diputación, José Martí, la alcaldesa, Maria Josep Safont, y ediles de la corporación participaron la marcha religiosa, cerrada por la Agrupació Filharmònica Borrianenca. Como es tradición, muchos niños y niñas que han tomado este año la comunión también acompañaron a la imagen llevada a hombros por la Asociación de Portadores de los Patronos.
Fiesta de las Paellas
Este viernes tendrá lugar la Fiesta de las Paellas, una jornada de hermandad a la que se han sumado cerca de 1.200 personas. Las peñas y grupos de amigos ocuparán la plaza de la Fira para degustar el arroz amenizado con la orquesta Twin’s y los más pequeños tendrán actividades en el recinto. La ciudad retoma los actos más festivos y encara con fuerza la recta final de las fiestas.
