La ofrenda de flores a la Mare de Déu del Roser ha puesto hoy, domingo, el punto y final a las fiestas patronales de Almassora. Peñas y collas, reinas y damas de otros años, entidades y agrupaciones locales, niños y niñas de comunión y la corporación municipal se han sumado a este acto que zanja los primeros festejos de octubre sin pandemia.
La puerta de la iglesia del Santísimo Cristo del Calvario ha sido el punto de reunión para los centenares de asistentes a este acto que tiene lugar cada primer domingo posterior al cierre oficial de la semana grande. Ni la lluvia ni las mascarillas que estuvieron presentes en la ofrenda de 2021 han formado parte del decorado de esta mañana, marcada por el sol y la alta participación.
La procesión
El público se ha concentrado a las puertas del convento a las 11.00 horas, desde donde ha partido la procesión camino de la iglesia de la Natividad por el itinerario de costumbre. Han abierto la comitiva los niños de comunión y aquellos que inician la catequesis; cofradías, asociaciones y entidades locales; la Junta de Damas de Santa Quitèria y Virgen del Rosario y reinas y damas de otros años.
Tras la imagen de la Mare de Déu ha desfilado la corporación municipal. La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y la reina de las fiestas, María Gonell Esteve, han sido las últimas en alcanzar el templo de la plaza de la Iglesia y depositar sus flores a los pies de la patrona después de que lo hiciera la corte de honor, formada por Nerea Montanos Sabiote y Alba Pesudo Luis. Por primera vez desde el 20 de octubre de 2019 ha tenido lugar esta imagen en tanto que el año pasado no hubo reina y damas debido a la pandemia.
La música y la clausura
La UIM La Esmeralda ha puesto los acordes musicales bajo la batuta de Víctor Alapont en todo el recorrido y a las puertas de la iglesia, donde la banda ha escoltado con su música el paso de la corte de honor. A su entrada el templo ha sido el párroco, Juan Ángel Tapiador, el encargado de recibir a las personas participantes y oficiar la misa que pone fin a las fiestas de la Mare de Déu del Roser.
La clausura de la semana grande coincide con el inicio de las fiestas principales de Lluïsos Almassora. La congregación de María Inmaculada y San Luis Gonzaga ha abierto su programación con el encendido de la sede ubicada en el Centro Parroquial.
La iglesia de la Natividad acogió la pasada noche del sábado la serenata en honor a la Mare de Déu del Roser. El tenor José Navarro-Forcada y Augusto Belau al órgano se ocuparon del recital al que han asistido también la reina de las fiestas, María Gonell Esteve, y su corte de honor.
