Benicàssim convertirá el edificio de la calle Bodolz, esquina con Desert, en un polifuncional y oficinas para las asociaciones locales. El Ayuntamiento ultima los trámites para sacar a licitación por 150.000 euros la redacción del proyecto de rehabilitación de este inmueble, adquirido por 1,5 millones el pasado año.
En el concurso público, aparte de la oferta económica se tendrá muy en cuenta la creativa. Por este motivo, el consistorio contará con un jurado compuesto por tres arquitectos de prestigio, en colaboración con el Colegio de Arquitectos de Castellón, que se encargará de valorar las cuestiones más subjetivas. Este comité de expertos tendrá un técnico jurídico experto en contratos de administración pública.
El Ayuntamiento presentará un programa de necesidades para reconvertir el edificio existente, de unos 1.600 m2, y se tendrán en cuenta aspectos como la «calidad de la distribución, la renovación del sistema envolvente, las instalaciones para adaptarlo a las exigencias actuales, como en materia de accesibilidad, de ahorro energético y facilidades para uso público», según explica el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz.
Prioridades del proyecto
El proyecto deberá definir la capacidad de la sala multifuncional, que se pretende habilitar en la nave de Bodolz, para saber cuántas personas podrán permanecer en este espacio.
Las instalaciones estarán pensadas para poder acoger la celebración de actos festivos, en el caso de lluvias y no poder hacerse en exterior, como puede ser la presentación de las reinas y las damas de las fiestas, entre otros, y no tener así que interrumpir la actividad del polideportivo municipal Torre Sant Vicent, como ocurre actualmente en algunas ocasiones.
Deberá definir la ubicación de aseos, vestuarios, una zona de cafetería, así como unas aulas en altura para poder trasladar los talleres y cursos que actualmente se realizan en la nave del Moll del Raïm, un edificio que no cuenta con las condiciones óptimas necesarias para este fin.
El bloque de oficinas deberá albergar una zona para despachos destinados a las asociaciones locales y otras entidades públicas, otro espacio dirigido a salas para la realización de pequeñas conferencias y sesiones de emprendimiento, según Díaz. Serán fundamentales cuestiones relacionadas con el clima y la sostenibilidad.
El Ayuntamiento pretende dar prioridad a este inmueble, que fue comprado casi al mismo tiempo que otro en la calle Bayer, ya que estará destinado a fines sociales y es muy necesario.
