Más de 1.435 pueblos en España no tienen ningún bar, según un estudio reciente de la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes en Servicios Sociales. El informe revela que la inmensa mayoría son pequeños municipios que no llegan a los 100 habitantes.
Es el caso de Vallat, un pueblo de apenas 70 vecinos situado en la comarca del Alto Mijares, que ha lanzado un SOS para abrir el único bar de la localidad, de titularidad municipal, que está cerrado desde el mes de septiembre.
Reducto antidespoblación
«Los bares son los últimos reductos contra la despoblación, por ser un servicio nucleador de la vida colectiva. La carencia de bares en una localidad limita las oportunidades de desarrollo personal y cohesión social», destaca el informe. Y se refleja en este pueblo del interior de Castellón, ya que desde que el establecimiento bajó la persiana, los vecinos no cuentan con ningún local para tomarse ni el café de primera hora de la mañana o una cerveza con los amigos.
Programa 'Reviu'
Después de quedar desierta la primera licitación de la explotación, el Ayuntamiento pidió ayuda a la Agenda Valenciana Antidespoblament (Avant) para lograr su reapertura, a través del programa Reviu, cuyo objetivo es que familias se instalen en municipios en riesgo de despoblación de la Comunitat para blindar servicios como las escuelas y mantener negocios que se pierden por falta de relevo generacional (bares, hornos, etc). El objetivo, su reapertura cuanto antes, siguiendo el ejemplo de Espadilla, tal y como reflejó Mediterráneo.
Ubicación del bar
Contrato mínimo de dos años
En este caso, ofrecen un contrato municipal de 2 años (más 3 prorrogables), cuyo valor es de 3.000 euros (5 años: 50 €/mes, más 21% IVA.). Este local dispone de un aforo de 35 comensales en el interior más una terraza exterior. El equipamiento es funcional y operativo para empezar a trabajar.
El objetivo: que abra antes del verano
«La intención es que esté abierto antes del verano, cuando se triplica la población, especialmente con gente de Castellón y de Barcelona», explica el alcalde, Óscar Edo.
Vallat se encuentra a una distancia de 16 kilómetros de Onda. El municipio cuenta con fibra óptica y cobertura móvil, transporte público a demanda e instalaciones deportivas, entre otros.
Alquilar una casa en el pueblo
«El servicio de bar es esencial», añade el primer edil que, incluso, ha realizado negociaciones con vecinos para solventar la falta de vivienda municipal para arrendar a los futuros gestores, consciente de la dificultad de encontrar interesados en el empleo si no cuentan con alojamiento. «Hablamos con gente del pueblo que tiene casas y está dispuesta a alquilarla en estos casos», comenta.
No en vano, un factor importante detectado por Reviu es la escasez de viviendas en el interior, una problemática de la que se ha hecho eco este periódico.
