Majo Castillo y Mario Catalán, CEO y CDO de Zeus, serán los dos ponentes de la jornada empresarial que organiza el periódico Mediterráneo y Bankia, y que tendrá lugar el martes en el hotel Jaime I, de Castelló.

Castillo, periodista de profesión, lleva cinco años dedicándose a la transformación digital de las empresas. «La tecnología big data en sí no es nada concreto. Se trata de todos los sistemas que se utilizan para gestionar grandes cantidades de datos. Pero ello es desde un ordenador ultrapotente que procese petabytes de datos hasta una solución BI o un software para hacer seguimiento de redes sociales, o un panel de Zeus que interprete de forma inteligente la información. El big data no es útil por sí mismo, debe tratarse, procesarse e interpretarse para que sirva para algo», destaca la conferenciante.

Desde el año 2016, Majo ha estado dirigiendo proyectos de visualización de datos para empresas como Santander, Prosegur, Airbus, Porcelanosa, Pepephone, Supermercados DIA o Repsol, a las cuales continúa asesorando.

DIGITALIZACIÓN // Castillo hace un repaso sobre esta nueva era de la digitalización. «Si tenemos en cuenta que el ordenador personal data de 1981, podemos hacernos una idea del recorrido que la llamada era de la digitalización aún tiene por delante. El reto más básico es asumir el uso de nuevas herramientas digitales para tratar la información. Dejar el papel y usar un ordenador. Y se van complicando en función de la fase de digitalización en que se encuentre la empresa. De un papel a un excel, de un excel a un procesor de datos específico, luego a un erp, un BI para interpretar la información…», revela.

«Desde el punto de vista humana, nos enfrentamos a la adaptación puramente técnica a esos sistemas pero también a la necesidad de atreverse a compartir información con los empleados, que ello no suponga un choque cultural dentro de la empresa, que sirva para sumar y no restar, que asumamos que los datos nos siguen donde los necesitemos… Todo ello son grandes retos de la era de la digitalización», añade.

COMPARTIR DATOS // Todo ello hace que las empresas castellonenses sean cada vez más conscientes del cambio. «En 2016, cuando empezamos, costaba mucho convencer de lo positivo de compartir información con los empleados, muchas eran recelosas de hacerlos e incluso de compartir sus datos con un proveedor externo, aun entendiendo sus beneficios. En solo tres años la evolución ha sido espectacular. Las empresas entienden que no están ante una elección. La que no utilice los datos que genera en todo su potencial, se queda atrás», indica.

ALMACENAMIENTO // Tras ello, el siguiente paso es cómo pueden sacar las empresas partido a esos datos. «Lo primero y principal es contar con sistemas para tener esos datos y almacenarlos. A partir de ahí, las posibilidades son infinitas. Algo fundamental es poner los datos en un contexto y saber transmitirlo de la forma adecuada y a las personas adecuadas para con ellos tomar mejores decisiones en su trabajo. A la velocidad que se mueve el mundo, otra clave es la interpretación del dato en tiempo real», dice Majo.

«Otro punto a tener en cuenta es poner en valor la visualización del dato. No basta con tener un analista que sepa hacer excels, hay que contar con personal experto en tratamiento de datos, visualización y transmisión de la información, y ese personal debe contar con habilidades analíticas, pero también con habilidades de negocio y psicosociales, para entender la manera correcta de transmitir la información en función del receptor», finaliza.