En Policlínica Fisioesport de Betxí, como centro multidisciplinar de medicina y fisioterapia, siempre estamos a la última en tratamientos para mejorar la salud de nuestros clientes, como son el uso de plasma rico en plaquetas o la terapia con bomba diamagnética.
Esta última consiste en un método terapéutico no invasivo basado en los mecanismos de repulsión generados por fuerzas de campos magnéticos de alta intensidad. Así, la intensidad del campo magnético asegura una recuperación mucho más rápida y de mejor calidad en múltiples patologías.
Entre ellas, cabe hacer hincapié en que la prevalencia en patología de espalda está creciendo: hernias discales, lumbalgias, dorsalgias, cervicalgias o radiculopatías son cada vez más comunes entre la población. Por ello en Policlínica Fisioesport Betxí tratamos muchas de ellas con la tecnología más novedosa y potente en la recuperación de lesiones: la bomba Diamagnética CTU mega20. Gracias a la estimulación endógena y neuromodulación del dolor aceleramos los procesos curativos del cuerpo mejorando la calidad de vida de nuestros pacientes.
Este tratamiento también está indicado en otro tipo de patologías como pueden ser lesiones deportivas, entre ellas esguinces, contusiones, roturas musculares...
Puede utilizarse además para el tratamiento de hernias discales, síndromes de estrechamiento de canal dural o cualquier patología vertebral, así como para fracturas y en cualquier tipo de patología traumática o degenerativa; recuperación de intervenciones quirúrgicas de cualquier índole; hematomas, heridas abiertas, úlceras y cicatrices; así como problemas neurológicos vasculares y dermatológicos.
Plasma rico en plaquetas
Otro de los tratamientos que hemos incorporado es el que aplica plasma rico en plaquetas. Se trata de un producto derivado de la sangre del propio paciente que tiene una concentración de plaquetas y otros elementos bioactivos plasmáticos por encima de los valores normales. Las plaquetas liberan los factores de crecimiento y otras biomoléculas, que son principios activos naturales responsables de la estimulación y aceleración de la cicatrización tisular local. Siempre que se produce un daño, automáticamente se activa este mecanismo biológico de reparación y regeneración.
Mediante esta terapia se puede obtener resultados como la disminución de la inflamación y del dolor, aceleración de la cicatrización de tejidos lesionados como tendones, cartílago, músculo, etc; además del aumento de la movilidad y funcionalidad articular y muscular, o la reducción del tiempo de recuperación.
Este tratamiento puede aplicarse en artrosis, tendinitis y otras patologías tendinosas, lesiones en meniscos y ligamentos, desgarros musculares, lesiones de pie como la fascitis plantar, pseudoartrosis, en cirugías como osteotomías o artroplastias, y también en otros casos como heridas quirúrgicas, úlceras crónicas, etc.
Es recomendable realizar una o varias aplicaciones, con una frecuencia que depende de la situación clínica y de otros criterios a considerar por el médico.
Esta terapia biológica no tiene efectos secundarios importantes, solo se han descrito efectos asociados a la aplicación, como la aparición de pequeños hematomas o alguna pequeña molestia que desaparece en unos días.
