El Comité Federal del PSOE aprobó ayer la designación oficial del secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, como candidato a la presidencia de la Generalitat Valenciana en el año 2011.

Alarte aseguró en su intervención ante el comité federal de su partido que ganar las elecciones en la Comunitat Valenciana “no es misión imposible”. Según informaron fuentes socialistas, Alarte intervino ante el comité federal de su partido para señalar que ahora, tras la remodelación del Gobierno central, se dispone de más armamento para afrontar la batalla política.

En este sentido, Alarte instó a sus compañeros de partido a que ese cambio de Gobierno y la estabilidad presupuestaria alcanzada con los acuerdos firmados hasta el final de la legislatura con PNV y Coalición Canaria no supongan “ánimo de una sola semana”, sino que permanezca esa sensación y sea la de la “remontada”.

El secretario general del PSPV-PSOE reconoció que la gente “asimila reformas a sacrificios”, pero manifestó que los dirigentes socialistas tienen la obligación de presentar una perspectiva mejor para el futuro.

También se refirió a los casos de corrupción que salpican al PP en la Comunitat, que cifró en más de cien, y dio la voz de alarma porque, debido a ellos, la Comunitat Valenciana es “cada vez más pobre”, indicó. Alarte comparó la recuperación de la iniciativa política por parte de Zapatero con la inoperancia de Francisco Camps, “incapaz” de remodelar el Consell porque sólo lo mantiene para “proteger a los Gürtel y defenderse ante la justicia”. Alarte criticó al Consell por ser “el más desacreditado, ineficaz y paralizado de la historia de la Comunitat Valenciana”, y aseguró que Camps se ha convertido en “rehén de su propio gobierno”, donde ha perdido “toda autoridad”.

El líder de los socialistas valencianos volvió a insistir en la necesidad de reducir el Ejecutivo autonómico a siete consellerias ante la “reiterada negativa” de Camps a disolver Les Corts y “marcharse” del Gobierno valenciano. “Camps debería haber disuelto Les Corts después de que el Tribunal Supremo lo imputara de nuevo por cohecho, y no ha hecho nada de nada”, criticó para acusarle de ser un “gobierno muerto”. H