El conseller pidió al Gobierno que revertiera a la Generalitat el dinero que anualmente generaron las cuentas de depósitos y consignaciones de los juzgados --un interés del 2% anual--, lo que supone 7 millones de euros, a los que habría que añadir los 19 millones devengados por las tasas.

2,055 millones de euros es el montante que prevé rebajar de los conceptos más generales, como sustituir las visitas en taxi por videoconferencias (700.000 €), material de oficial personal (400.000 €) o alquiler de las sedes (778.000 €).

Suponen el principal montante y prevén ahorrar 1 millón con la contratación centralizada de la luz (400.000 €), y la activación del plan de eficiencia energética (600.000 €); disminuir el gasto en papel (1,38 millones), con papel normal y no oficial (1 millón), impresiones a doble cara, notificaciones por Lexnet y copias escaneadas.