La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, afirmó ayer que iba a dar al vicepresidente del Consell, José Císcar, “dos besos, como he hecho siempre; es mi compañero de partido”, explicó a preguntas de los periodistas. Císcar había recomendado a Castedo dimitir de todos sus cargos a raíz de su imputación en el caso Brugal. Interrogada si piensa dimitir si se abre juicio, Castedo preguntó: “¿Y si me atropella ahora un coche cuando salga del Ayuntamiento? ¿Qué pasará? Os lo dije en una ocasión y os lo vuelvo a decir: de futuribles, lo primero, no hablo, y lo segundo, no voy a dar más morbo”, dijo. H