En pleno debate sobre el modelo de Estado, marcado en los últimos días por el eco social y político de la cadena humana independentista que traspasó las fronteras catalanas para llegar a Vinaròs, el presidente de Les Corts, Juan Cotino, decidió ayer entrar en escena con su defensa de una revisión constitucional en materia de estructura del Estado y del sistema de reparto fiscal, aunque sin abogar por ello, aclaró, “por la ruptura, como proponen los catalanistas”.

El mismo día en que el presidente catalán, Artur Mas, recibió la respuesta del jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, sobre la consulta popular en relación con la independencia, en la que el líder popular ofreció diálogo y reiteró el no al referéndum, aunque de forma menos concisa, Cotino dijo en un artículo publicado en su blog personal en relación con la marcha independentista del pasado miércoles que “no podemos mirar hacia otro lado”.

Sin embargo, aseguró que la Constitución Española, “es del año 1977 y ahora que ya formamos parte de la UE, puede ser revisada en algún aspecto como, por ejemplo, la organización territorial del Estado o el actual modelo fiscal”. Insistió en que “no abogo por la ruptura, como proponen los catalanistas de allí y de aquí”, pero sí cree que “se abre un nuevo periodo en el que se debe reformar algunos aspectos de las estructuras del Estado tanto en el campo municipal y autonómico como en el estatal, partiendo siempre del principio de subsidiariedad”, indicó.

Cotino denunció que “la provocativa marcha invasora y las banderas independentistas esteladas se hicieron presentes en las hermosas comarcas del norte de Castellón”, en lo que supone “un intento de injerencia en la vida de otra comunidad desde el nacionalismo independentista catalán”. “Frente a ello, no podemos quedarnos callados. Como valencianos tenemos la obligación de reaccionar enérgicamente para no tenernos que arrepentir en el futuro ni propiciar que nuestras generaciones venideras acaben viviendo en una colonia catalana con capital en Barcelona”, afirmó. A su juicio, “no podemos quedar reducidos a ser un mero apéndice de una entelequia centralista que dejaría en mantillas el tantas veces denostado centralismo”.

Cotino señaló que no se puede “mirar hacia otro lado” porque, apuntó, “estamos en un momento delicado de la historia de España que recuerda a los difíciles momentos de la época predemocrática”. H