El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, manifestó ayer que «son momentos de mantener la convivencia, que es un valor fundamental, y garantizar el estado de derecho» y, por otra parte, «abrir de una vez las vías de diálogo entre el Gobierno central y Cataluña». Puig hizo estas declaraciones al ser preguntado por las manifestaciones realizadas el viernes por la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, que afirmó que la solución en Cataluña pasa por que «todo el mundo» dé «dos pasos atrás», que implican que se renuncie al referéndum del 1 de octubre, aunque indicó que esa cuestión ya la ha resuelto el Tribunal Constitucional.

Tras la celebración del Día de la Policía en el Monasterio de San Miguel de los Reyes, en València, Puig insistió en que «se debe mantener la serenidad y la prudencia y no sobreactuar» por ninguna de las partes, instando al diálogo porque, según aseguró, «no hay una solución sin diálogo».

CRÍTICAS DEL PPCV // Por otra parte, la secretaria general del Partido Popular de la Comunitat Valenciana (PPCV), Eva Ortiz, exigió a Oltra «lealtad» a los valencianos y a la institución que representa en la defensa de la Constitución, y le reclamó que «rompa» con aquellos que defienden posturas al margen de la ley.

Ortiz se pronunció de esta manera en relación al «cruce de acusaciones» y declaraciones de los miembros de Compromís, y pidió a Oltra que «se quite la careta» con el referéndum de Cataluña. «Hasta los suyos nos advierten de que la vicepresidenta no juega limpio y que está interpretando un papel» para «no perder el sillón», aseguró en un comunicado. E invitó a la consellera a definir «de qué lado está», si de los que «defienden la radicalidad, como expresaban sus compañeros de Compromís o de los que defienden el Estado de Derecho».