La Conselleria de Justicia y Administraciones Pública ha decidido aplazar las oposiciones a la Generalitat Valenciana previstas para este fin de semana, así como las convocadas para mediados de febrero, en concreto, las del día 13. La decisión se adopta como consecuencia de la situación de descontrol de la pandemia en la Comunitat Valenciana y al considerar por parte del departamento que dirige Gabriela Bravo de que celebrar estas oposiciones sería demasiado arriesgado.

La conselleria cede así a la petición reiterada de las organizaciones sindicales que desde hace semanas llevan pidiendo que quedaran en suspenso las oposiciones a la Generalitat convocadas en las diferentes ofertas de empleo público hasta que mejore la situación sanitaria. Este mismo lunes, tal como publicó este diario, la conselleria mantenía la convocatoria del sábado para plazas del grupo A1 de Ingenieros de Caminos, Minas y Montes, unas pruebas a las que se presentaban 233 aspirantes. Para el ejercicio del 13 de febrero había 657 admitido y eran oposiciones para los cuerpos de informática, salud en el trabajo y de deportes.

Ambas oposiciones de GVA han quedado suspendidas, mientras la conselleria deja en el aire el resto del calendario en función de cómo evolucione la pandemia. Las siguientes pruebas estaban previstas para el 26 y 27 de febrero y afectan a mil aspirantes.

Las medidas restrictivas, con cierre perimetral incluido, permitía la movilidad de aspirantes a pruebas oficiales. Sin embargo, el riesgo se ha considerado finalmente excesivo y se ha optado por el aplazamiento. La consellera Gabriela Bravo ha comunicado esta decisión a los sindicatos.